No Apto Para Parejas Normales 1

Capítulo 18

Anthon.

Un mes después...

Hoy era lunes, pero hoy es un lunes diferente. Mientras que para otros es odiado, el mío es amado, porque Jenna volvería.

Jenna tuvo que irse a otro país porque se iba a celebrar la boda de su tía, no me acuerdo de su nombre, Jenna se quedó porque sufrió un robo, le habían robados sus cosas como ropa y su pasaporte, ella me contó que una semana después del robo encontraron el ladrón, cuando estaban planeando venir, se presentó un clima terrible, que cancelaron su vuelo hasta ayer.

Me encontraba en el aeropuerto, con un cartel, que decía "Mi alíen volvió a la tierra, yei", sí, es genial... Bueno, mi cartel real diría; "Por fin volviste pendeja", pero si lo leía mis suegros se enojarían conmigo.

Estoy yo, y luego esta los novios locos.

Y la veo.

Estaba caminando con su familia, con maletas. Cuando me ve, suelta todo lo que traía, sabía que tenia una estúpida sonrisa en mi rostro. Ella me abrazó con fuerza.

—Te extrañe—Me abrazó más fuerte.

—Ya veo, se me agota el oxígeno—Digo con voz ahogada.

Ella me suelta y me besa los labios.

—De verdad te extrañe.

—Yo también—Con mi dedo índice toque la punta de su nariz, ella y yo acordamos que ese gesto significaba "Te debo muchos besos".

Teníamos gestos raros.

Como por ejemplo. Si toco su mejilla con la punta de mi dedo, le estoy diciendo que me diga lo que quiero saber, o cuando toco su hombro es que no me ignore, si toco su frente es que quiero saber lo que piensa, que si toco estómago es que estoy feliz de verla, que si toco su brazo es que necesito cariño, y si toco sus labios le estoy diciendo que es una tremenda pendeja o que haga silencio, y tenemos muchos más.

—¿Sabes lo que pensé cuando estaba en la boda?

—¿En qué?

—En lo bonito que seria que nos casáramos—Tocó mi estómago.

Okay, me sorprende.

—Seria muy hermoso.

—Sí—Ella bajo la cabeza

La abrace por los hombros y besé su cabello. Huele bien.

Ella alzó la cabeza y miró fijamente mi pecho, tocó mi pecho con la punta de su dedo índice, fruncí el ceño, no sé que significa eso.

—Muy pronto estaré ahí.

Sonreí.

—Ya estás ahí—Tomé su mano y la puse en mi pecho para que sintiera los latidos de mi corazón.

—¡Eso fue hermoso!—Chilló Crystal, acaba de llegar, finge llorar de la emoción.