Ámbar
Los meses se pasaron apresuradamente después de que la verdad salió a la luz. Ya era el final del año y la noche de mi fiesta de graduación. Simón ya no vivía en mi barrio, no estudiaba conmigo y también ya no lo vía desde que lo había expulsado de mi casa. No tenía rabia, pero era mejor que siguiéramos caminos distintos.
- Otra, por favor. – Mi padre pidió que mi hermana Luna y yo modeláramos juntas para otra foto. – Por favor, mis hijas se ven más lindas que nunca. – Él dijo orgulloso y la campana sonó.
- Debe ser Delfi. – Dije y caminé hasta la puerta. Cuando la abrí tuve una sorpresa. – ¿Qué hacés acá?
- Vine a pedirles perdón. – Sol me dijo mientras entraba en la mansión. – Yo sé que no es un buen momento, pero pensé que quizás podrían perdonarme ya que están felices.
- ¿Perdonarte? – Luna escuchó la voz de Sol y fue hasta ella. – ¿Cómo pensás que puedo perdonarte, Sol? Me secuestraste, me hiciste daño, arruinaste mi vida, mi año...
- Perdón. – Sol volvió a pedirnos perdón. – Yo hice todo porque Sharon me mintió. Yo solo quería vengarme de todo lo que Rey supuestamente nos había hecho pasar. Mi mamá murió y yo no tenía dirección, sentido, no había que hacer.
- ¿Qué pasa, chicas? – Bernie preguntó viniendo en nuestra dirección. – Sol. – Él pronunció el nombre de su otra hija y suspiró. – ¿Qué querés?
- Pedirles perdón. – Ella empezó con la misma cosa de antes. – Yo hice todo porque viví una mentira. Así como Ámbar también vivió en una mentira. Luna fue la única que siempre tuvo su verdad. – Sol hizo una pausa. – Yo estaba muy dolida, lastimada y quería vengarme porque mi madre estaba muerta y ya no tenía nadie. Y ahora, después de mucho tiempo, logré comprender que tengo a ustedes. Son mi familia. Mis hermanas y mi padre y yo quiero estar aquí para ustedes y quiero que ustedes estén aquí para mí.
- Mira, Sol, nosotros jamás te vamos a dar las espaldas, pero necesitamos de tiempo. – Luna la encaró. – Te entiendo, pero no te perdono aún. Necesito un poco más de tiempo para intentar superar lo que pasó. Intentaste robar a mi vida.
- Ya lo sé. – Sol miró hacía el suelo. – Gracias Bernie por ayudarme con el dinero de la casa.
- No me agradezcas. – Él intentó sonreírle. – Sos mi hija y te quiero cuidar, pero aún no podemos estar tan cerca, Sol. Espero que algún día las chicas puedan aceptarte y que podamos vivir como una familia.
- Es mi deseo también. – Sol admitió y empezó a llorar. – Mientras tanto, quiero agradecerles por no haber hecho nada conmigo después que descubrieron todo.
- Es mejor que te vayas, Sol. – Yo tuve el valor de decir lo que todos queríamos. – Hoy es un día feliz y creo que no es el momento para esto. Después podemos volver hablar sobre nosotros.
- Tienes razón, Ámbar. – Sol nos dio una media sonrisa. – Espero que con el tiempo todos nos acerquemos.
- Quizás. – Luna forzó una sonrisa. Sol se volteó y se fue.
Delfina entró por la puerta en el mismo momento que Sol salió. Mi mejor amiga nos miró asustada y balanceamos la cabeza negativamente diciéndole que estaba todo bien. Mi padre sacó otras fotos, ahora con la presencia de Delfina y no tardó mucho para que la limusina llegara. Nos despedimos de mi padre y fuimos hasta la limusina que él nos había pagado. Entré en el vehículo y me senté. Las chicas hicieron lo mismo. Durante el viaje, me obligué a contar a las chicas que había recibido un mensaje de Simón aquel día un poco más temprano. Les mostré el contenido del mensaje y ellas me miraron al mismo tiempo.
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CUANDO NADIE VE | Fanfic Simbar (Completa)
Fanfiction"¿Que pasa si descubren algo que nadie puede enterarse?" Sinopsis: Ámbar Benson tiene la vida perfecta: Un padre que le da todo que pide, un novio rico que la quiere, mucho dinero para hacer lo que quiera de su vida, además de frecuentar las mejores...