C.E. 1

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  Mila.
  Me presento. Soy Mila, hermana de Melissa Telles. La popular de la clase. Amiga de la familia Scott. Aunque la misma popularidad me ha cegado. Me metió en el mundo de las drogas, he perdido a mi hermana mayor y murió mi hermana pequeña. Casi mato a Harry, he perdido la confianza de Emery, Auden me odia por hacerlo popular y Playboy y alejarlo más de Mery, y Mery me odia por ser cómplice y amante de Justin. En general, me odia todo el mundo. Os contaré la historia más concretamente para que lo entendáis más fácilmente.
  Cuando Emery y Harry empezaron a salir, yo le pagué a Brianna para que los separara. Harry es solo mío, y Brianna es un daño colateral. Años después, lo he dejado de intentar, por alguna extraña razón no quieren separarse el uno del otro. Intenté matar a Harry junto Brianna para que escarmentará, pero Brianna pensó que era por el mundo de las drogas. A ella le cayeron unos años de cárcel por intento de asesinato, pero por magia de la suya (lo más puta del mundo) se la rebajaron y ya saldrá dentro de poco.
  Cuando Mery y Auden dejaron de ser mejores amigos por culpa de Justin, yo me hice amiga de Auden poco tiempo después. Le hice popular metiéndolo en un grupo de chicos, no sin antes superar la prueba previa que le hicieran. Más tarde, se hizo Playboy porque odiaba a todas las chicas de la faz de la tierra. Se las tiraba y luego las dejaba, pero a mí no me prestaba atención, ni siquiera me echó un triste polvo. De modo que le comí la cabeza y la polla a Justin e intentaremos separar esa pareja.
  Mi hermana pequeña se llamaba Stephanie. Era una chica preciosa, inteligente, sensible, educada y jodidamente ella. Pero le hacía la vida imposible porque nuestro padre le hacía más caso a ella que a mí. Un día encontré una carta encima de mi cama, era de ella. Me explicaba muchas cosas, entre ellas la razón de su suicidio: «No puedo vivir en un mundo donde se meten conmigo por todos lados». Pero entre todas esas letras, decía que tuvo la suerte de tener a Melissa cómo hermana mayor, que a mí me quería pero era una culpable de su muerte. Decía que no quería soportar abusos, comentarios, e incluso violaciones. Sí, a ella le han violado varias veces, pero no lo contaba. Inmediatamente quemé la carta y fui corriendo al baño de su cuarto, donde su cuerpo yacía sin vida. Lloré, claro que lloré.
  Su suicidio hizo mi vida un antes y un después. Para olvidar el dolor que me causaba estar así de mal, me metía rayas, pero como mi padre, aunque sea rico, no me daba dinero suficiente, me metí como traficante. Más tarde me hice la popular del instituto. Y así empezó todo.
  Me siento como una mierda. He entrado en un bucle de dolor constante. Pero la popularidad no me deja volver. Ni la droga. Solo me queda el suicidio.
  Pero no quiero ser una cobarde como Stephanie. No, lo siento pero no.
  Aunque eso solucionaría muchas cosas, pero no quiero que mi padre sufra otra muerte, otro suicidio. Mi madre me odia porque sabe la verdadera razón, y por eso me odia. Incluso se separó de mi padre para no verme, o eso creo.
  Pensándolo bien, mi vida es una mierda.
  Dejo de grabar todo lo que he dicho y lo mando al grupo con la gente mencionada y algunos más. Más tarde, puede que unos segundos entro en mi baño, lleno la bañera y examino la cuchilla que pronto me clavaré a lo Hannah Baker.
  Cuando ya está llena, me pongo algo de ropa vieja y me meto. Cojo la cuchilla y sin pensarlo dos veces la clavo en la piel, más concretamente en las venas de mi brazo. Repito el proceso en el otro brazo.
  Empiezo a hiperventilar hasta que veo una estela de luz, y me aproximo a ella lentamente. Esto tiene que ser la muerte.

 

¿Qué pasó con los hijos de Hessa? #wattys2019 #OmegaAwards2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora