Capítulo 19.

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Justin.
El plan cada vez va mejor. Tengo a Mery en el bote, seguro que en un tiempo cae.
-Bro, estás distraído.-dice.
-Lo sé Dave, estaba pensado en algo importante.-dije.
Me llega un WhatsApp al móvil en ese momento.
Nueva fase del plan: haz lo que te dije.
Llegó el momento.
-Dave, lo siento pero mi padre me reclama.-miento.-me tengo que ir.
-Vale bro, hasta luego.
Salgo del bar donde estábamos y voy a las habitaciones de la universidad. La fraternidad donde vive Mery y Auden. Lo mejor de todo es que esto será muy fácil. Lo peor... es la ejecución del plan. Si, suena contradictorio lo sé.
Antes de llegar, compro todo lo necesario a un contacto de confianza. Me hago una nota en mi teléfono para comprobar que está todo lo necesario.
Cámara
Mery
Droga
Agua
Apuntes de la universidad para el estúpido trabajo
Gancho para despistar a Auden.
Mierda, me falta el gancho. Busque el número de mi contacto por WhatsApp.
Me falta el gancho para despistar al palurdo.
Al poco me contesta:
Yo seré el gancho.
Si nos pillan sabrán tu identidad.-contesto.
No te preocupes por eso, todo saldrá BIEN.
Taché ese elemento de la lista y me adentré. Anduve por los pasillos y llegué a la habitación de Mery.
-Hola.-saludé.
-Justin.-contestó seca.-¿Qué quieres?
-Uy que borde. Solo vine para hacer el trabajo ese que han mandado.
-¿Traes apuntes y cosas?
-Por un tubo.-digo levantando los apuntes guardados en la carpeta que tenía en la mano.
-¿Ya está, no piensas escribir ni pasarlo al portátil, nada?
-¿Qué harás tú, yo traigo apuntes y encima tengo que escribir y redactarlo en el ordenador?
Algo hizo click en su cabeza, y añadió.
-No, yo lo escribo, no te preocupes.
Se sentó en el escritorio y me puso una silla al lado para sentarme.
-Voy a por agua, ¿quieres algo?-dice.
-Sí, pero espera voy contigo.
Vamos a la mini cocina que hay en todas las habitaciones de este sitio. Coge un vaso y lo llena de agua.
-¿Qué quieres?-me pregunta.
Meto la mano en el bolsillo disimuladamente y palpo la bolsita de la droga.
-Sí, una Coca Cola si tienes, por favor.-fue al frigorífico y yo echo los polvos de la droga en el agua. Queda igual de transparente, menos mal, sino esto no llega a funcionar.
-Toma.-me da la lata.
La abro y le doy un trago a la vez que ella le da un trago al agua.
-Gracias.-le digo.
-De nada.-me contesta.
Nos volvemos a sentar en el escritorio y nos disponemos a hacer el trabajo. Empiezo a notar que ya le está haciendo efecto la droga.
Una vez echo el trabajo, ya la droga ha hecho de las suyas y el plan va perfecto.
Ya va a empezar todo.-redacto en un mensaje.
-Justin, me siento mal, ¿te puedes ir?
-Sí, claro.-digo con un chasquido de lengua.
Se desmaya y la llevo a la habitación. Pongo el soporte de la cámara y la cámara en un ángulo donde se ve la cama pero no se verá que está totalmente dormida. Bueno, dormida no estará, solo que no lo sentirá muy duro.
La beso al encender la cámara y me quedo sorprendido cuando noto que sigue el beso, y más me sorprende que me quite la sudadera, a la vez que ella se quita la suya.
Adiós a mi cordura, la agarro de las caderas y la empujo a la cama. Ella me mira con lujuria y se baja los vaqueros. Cuando me voy a bajar los míos, me da una patada en mi amigo, se viste, rompe la cámara y se va corriendo de esa habitación.
Me quedo estupefacto, todavía no sé qué acaba de pasar. Creo que la he cagado.

¿Qué pasó con los hijos de Hessa? #wattys2019 #OmegaAwards2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora