Vacío. ¿Cómo son las citas realmente?
"Dos Iris Azules"
¿Cómo son las citas realmente? Esa pregunta rondaba por mi cabeza desde que nos subimos al auto de Keydan. Dana cantaba una canción de Ed Sheeran — su único cantante favorito — y yo esperaba con energía mi turno para poner una de Big Time Rush y poder cantar a todo pulmón, aunque eso no fue posible porque Keydan estaciono y apago el auto sin importarle que me tocaba poner la canción.
— ¡Ey! — nos quejamos Dana y yo al unísono— Adentro podrán cantar — dijo dejándonos dentro del auto
Me baje corriendo cuando Dana también se bajo, ambas nos posicionamos a los costados de Keydan, prácticamente aferrándonos a sus brazos con temor. ¿Por qué? Yo no sabía que idea de citas tenía Keydan, pero ahora comprendía que no compartíamos la misma idea de algo romántico y simple. ¡Estábamos en un feo callejón sin salida! O bueno, las puertas de acero al final, tampoco eran buena señal. El letrero estaba apagado y mis ojos no podían distinguir en la oscuridad que era lo que decía.
— Tengo miedo — susurro Dana.
- Nada te pasará - le respondió Keydan.
Y justo en ese momento me pareció escuchar a un hombre vomitar. Que asco. Nos acercamos sólo para que tocará la jodida puerta, se abrió, un hombre enorme le pidió una tarjeta y solo Dios sabía a donde nos estábamos metiendo. ¡Hasta ya me podía imaginar charlando con la mismísima mafia italiana! Al carajo todo, yo me iría de aquí con o sin él, pero cuando estaba por dar un paso en reversa, el condenado de Keydan me tomo de la mano para arrastrarme por un entorno pasillo de iluminación roja. ¿Esto era un prostíbulo? Las cortinas de terciopelo rojo tampoco me ayudaban mucho.
— ¡Bienvenidas señoritas! — grito una chica a nuestro lado cuando pasamos las cortinas
— ¡Por favor! ¡No quiero prostituirme! ¡Soy demasiado joven para ese mundo de pervertidos! — rogó Dana con sus manos juntas
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Kate y Key
Teen FictionUna chica, donde su vida se basa completamente en el mundo de la escritura. Un escape de la realidad, como le gusta llamarle, y todo eso llega a mejorar en el momento en que decide escribir una historia. El único problema... ¿Qué historia escribir? ...