Sobre las seis y media llega mi madre, he acabado leyendo con el portátil, y he comido unos macarrones que me he cogido de casa, me he quedado con hambre, ya que ayer no cené, y hoy no he desayunado nada. Mi madre ha traido un puzzle, para que lo hagamos entre las dos. Y eso hemos hecho, hemos estado hasta las nueve haciendo el puzzle, y lo hemos acabado y lo hemos dejado allí. He convencido a mi madre de que vengo a casa a cenar, y mañana por la mañana volveremos, és un palo venir tanto, ya me sé este lugar como la pala de la mano.
Sobre las cinco de la mañana mi madre me despierta, dic que la han llamado del hospital, y le han dicho que Tom ha despertado, y ahora estamos de camino.
Llegamos a la habitación y mi madre se lanza encima suyo a abrazarlo, después lo hago yo, estamos muy bien, pregunta por papá, y madre le dice que está trabajando, que le ha salido una emergencia, y que no ha podido venir, pero que por la tarde vendrá, vaya mentira, quiero decirle la verdad a Tom, pero se acaba de despertar de estar casi ddos semanas en coma y no quiero amargarle. Por la mañana, sobre las nueve, mi madre va a comprarse un café.
-Elena
-Dime
-A lo mejor crees que me he vuelto loco, pero ¿han arrestado a Samuel? Esque, noto como si... no sé
-Sí, lo han detenido, por tráfico y cosas así.
-Lo sabía, yo ya le decía que no se metiera en esas mierdas, joder, ¿cuanto tiempo estará ahí dentro?
-No lo sé, no he habalado con él desde hace unos días
-A vale, bueno pues nada
Llega mamá, está muy feliz, pronto volverá todo a la normalidad, ha traído unos donuts para nosotros, y ha comprado otro puzzle, pra hacerlo todos juntos, bueno papá no sé si volverá, pero me da igual, és un capullo, noa ha abandonado en el peor momento.
Nos cuesta hacer el puzzle, pero és genial estar todos juntos (sin papá), estamos pasando un rato genial, hechaba de menos estos momentos.
Mañana és el cumpleaños de Tom, esta noche le prepararemos las cosas mientras duerme, y cuando se despierte que lo vea, no le daremos ningún susto, porque tiene el corazón débil, y no queremos matarlo.
Nos han dicho que tiene que estar aquí una semana más, y si ya está bien, podrá irse a casa.
Sobre las ocho y media, la traen la comida a Samuel, y cuando acaba de cenar, y se va a dormir, mamá y yo nos vamos a casa.
Mamá me levanta a las seis cuarenta y cinco, y vamos al hospital, llegamos y entramos sin hacer ruido, y empezamos a montar las cosas, hinchar globos y colgar las guirnaldas eso es lo más difícil, porque no hay nada a lo que agarrar el hilo, o sea que lo engancho en la pared con celo, se ve un poco chapucero, pero si no te fijas no se nota, són las siete y veinte, y estamos con todo preparado, no queda nada que poner, la verdad es que se ve muy chulo.
-El pastel
-Mierda el pastel es verdad
-Voy a casa preparo un bizcocho y vengo ¿vale? Tardo diez minutos
-Será mejor que compres alguno hecho en alguna pastelería, porque a lo mejor se despierta y no estás
-No estarán abiertas, y tengo que hacer ese que tanto le gusta, el que hacemos siempre al volver de vacaciones
-Bueno vale, pero date prisa
-Ahora vengo
Me quedo sola en la habitación, bueno con Tom.
