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Son las nueve y media, y ya estoy lista, espero que no llegue tarde, estoy emocionada con esto, bueno y también hambrienta, mmevo desierta desde ls ocho, y m he duchado y meh puesto guapa, me ha cosatado mucho, espero que no se note.
Me llama a las diez en punto:
-Estoy abajo
-Ahora bajo
-Valep
Le cuelgo y bajo por las escaleras super rápido.
-Buenos días
-Buenas
-Sígueme, vamos a ir en coche
-¿Tienes coche?
-Sep, un audi Q3
-Vaya, no entiendo mucho de coches pero suena potente
-Tampoco entiendo, me he memorizado el nombre para impresionarte
Reímos y subimos al coche, es un coche chulo, parece que tiene pasta...

-¿Y como sé que no me quieres secuestrar?

-Pues, no lo sabes,a lo mejor soy un pedofilo violador

Nos reímos los dos, y luego nos quedamos en silencio. El viaje dura unos cinco minutos, y me llevo a una cafetería que se ve muy mona, tiene buena pinta, y también pinta de ser cara.

-Tranqui que yo te invito

-¿Como sabías lo que estaba pensando?

-Te lo he visto en la cara que has puest-Dice ríendo- Tengo mesa reservada

-¿Has reservado mesa para desayunar? -Digo ríendo, esto da risa, ha reservado mesa para desayunar en una cafetería.

-Sí, esto esta siempre lleno, si no llego a reservar nos quedamos fuera, o sea que de nada

-Gracias

Entramos, hay mucha gente, y hay unas cuatro mesas reservadas, vaya frikis. Nos sentamos en una mesa, y un camarero nos trae una carta a cada uno, hay un montón de cosas, yo me pido 30 gramos de churros, una leche con colacao del "menú" infantil, y un croissant de chocolate. Él se pide un café con leche, un gofre y churros de chocolate con unas virutas de nosque. 

Nos pasamos toda la mañana ahí charlando y comiendo churros, me lo paso muy bien con él, me entretiene, pero no sé a que quiere llegar. Nos clavan casi unos veinte euros por el desayuno, y luego me lleva a casa, le invito a comer, y me dice que vale, pero que él prepara la comida. Está haciendo lasaña, no sabia que tenía esas cosas, pero las tengo, y ahora un chico que hace una semana no sabía que existía está preparandome una lasaña mientras yo me tomo una cerveza y le cuento mi vida, creo que estoy empezando a estar bien viviendo sola.

Sobre las cinco se va de casa, al irse me quedo sola sentada en el sofá en silencio, otra vez estoy sola, y sin saber que hacer, ya sé, limpiaré la habitación de Tom, a lo mejor me ayuda a superarlo un poco...

Voy a su habitación, y empiezo a urgar, le recogo el estuche, los deberes y esas cosas y le meto en la mochila, el libro que había en la mesa está en mi habitación, lo dejé ayer. Ya he despejado la mesa, ahora le inspecciono los cajones, en el de arriba encuentro unas hojas en blanco, bolis, clips, celo, grapas y una grapadora. En en el segundo cajon, el del medio, hay un par de mecheros, un paquete de tabaco, unas pastillas, condones, espera espera ¿tabaco? ¿pastillas? ¿condones? MADRE MÍA. No sé si mirar el último cajón, el de abajo, bueno, ¿que es lo peor que puede pasar? Lo abriré. Vaya, solo hay una libreta, y un boli, cojo la libreta y la abro, creo que es como una espécie de diario o algo así, lo abro por una página al azar, y la leo:

"12/3/18

Hoy he vuelto a quedar con Carlos, hacía timpo que no lo veía, y está más guapo, muucho más guapo, creo que podría ligarmelo."

Abro otra página.

"4/4/18

Hoy me ha dado un ataque, hacía tiempo que no me pasaba, definitivamente no lo hechaba de menos. Mario me dará más pastillas, pero de las de mi problema, no de las otras... :)

Creo que ya he encontrado un entretenimiento para como mínimo los tres próximos días.

A pesar de todoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora