Me encuentro fatal, llevo toda la mañana con un dolor de cabeza increíble, insoportable, y solo quedan dos pastillas de las que me tomo cuando me encuentro mal, no sé comi comprar pastillas, no sé si me venderían, porque soy menor, aunque el año que viene cumplo los dieciocho, como Tom, murió el día de su cumpleaños, vivió dieciocho años justos, una pena, ahora venía lo mejor, vaya mierda, bueno al menos no tiene que pasar por todo esto, ojalá estuviera aquí ahora mismo, y yo no estaría tan sola, bueno, él siempre salía, pero me sentiría mejor con él, mucho mejor, mucho menos sola.
Yo:No sé, tendrá que hacer algunas cosillas...
Manel:A tus pies señora misteriosa
Yo: Primero, dime los turnos que haces en el mercadona
Manel:Vale, pero ¿porque quieres saberlo?
Yo:Para saber cuando ir a comprar.
Manel:Vaya vaya... Entonces será un placer decirtelo
Manel:Todos los martes y jueves por la mañana, y miercoles, viernes y sábado por la tarde.
Yo:Genial
Manel:Espero verte este jueves...
Yo:Si, creo que justamente ese día tendré que hacer la compra
Manel:Pues genial :)
Al día siguiente ya és jueves, iré a comprar. Estos días me he ido apañando bien yo sola, pero me he sentido muy sola, me he visto todas las peliculas de navidad que hay en netflix, y no eso que no és navidad, pero me recuerda a cuando era pequeña, y en navidad cada noche veíamos una peli de navidad, , en el calendario de adviento, en vez de haber chocolate, habían pelis, y teníamos que ver una cada día, era muy guay. Bueno, yo me he visto más de doce, pero bueno, no importa, me trae muy buenos recuerdos.
Iré a comprar ya para que me dé tiempo de ver a Manel, quiero verle, me irá bien un poco de contacto humano, de hecho, lo necesito, lo necesito bastante.
Llego al mercadona, doy una vuelta cerca de los mostradores a ver si veo a Manel, pero no le veo, así que voy a buscar lo que necesito, cojo huevos, pasta, caldo, pollo, pan rallado, sal, natillas, cereales, los ositos esos, en honor a Tom, y ya no cojo nada más, esta vez he cojido más cosas, cada vez estoy aprendiendo un poco más a hacer la compra, ya cojeré práctica, bueno, en realidad espero no tener que llegar a poner en práctica...
Mientras voy hacia la cola, alguien me agarra del brazo, yo me suelto muy bruscamente, y me giro rápido, creo que és Manel, ahora que lo pienso, tampoco sé muy bien como és.
-Ehh, que soy yo, Manel
-Ah... Eh... Hola, lo siento
-Tranqui, no importa
Le sonrío, y me quedo en silencio, no sé que decir, esto és muy incómodo, me recuerda a cuando conocí a Samuel, espero que con él no me pase lo mismo que con Samuel, espero que vaya mejor.
-Bueno, vamos, te acompaño a la caja y te atiendo
-Vale, vamos
Vamos hacia la caja y por el camino me pregunta:
-Bueno y ¿Me dirás ya tu nombre?
-¿Ya lo quieres saber? Que impaciente...
Llegamos a la caja, hay mucha cola, yo me pongo en la cola y él le dice algo al oído a su compañera y ella se va a hacer otra cosa y él se queda en la caja. Mientras va a atendiendo a las otras personas me va echando miraditas, yo le sigo el juego. Ya me toca.
-¿Quiere bolsa?
-Nop
-¿Y salir conmigo esta tarde?
-Me lo pienso
Se ríe y yo me voy, ha estado muy bien estar con él y hablar con él, bueno creo que él quiere otra cosa, y yo... No sé.
