Cap#18

119 12 1
                                        

Pov Jayden 😍

Literalmente Sarisha intentó matarme, yo estaba tranquilo tomando sol en un flotador y ella viene de improviso y me empuja, actualmente la estoy persiguiendo por todo el jardín tratando de atraparla, tiene una cara de miedo que es para reírse, pero no voy a demostrar que esto me parece gracioso, arruinaría el momento ¡le enseñaré a respetarme! justo en ese momento algo pasa corriendo entre mis piernas y pierdo el equilibrio, término cayendo nuevamente a la piscina.

Que vergüenza...

Salgo a la superficie y encuentro una escena inolvidable.

Sarisha se está riendo, su linda sonrisa es totalmente natural libre de restricciones, me encantaría verla así mas seguido, ahoga su sonora risa con sus manos, o eso intenta, está sentada en el pasto riéndose de mí, pero el sólo hecho de verla reír de forma genuina es único y saber que soy responsable de este bello momento es... Aún más increíble. Su rostro está tan rojo, las gotas de agua bajan por sus voluptuosos senos, llego a ver como una gotita de agua baja por su abdomen hasta esconderse en su ombligo.

Ese es mi límite. No puedo verla así de sexy y no tocarla, ella me provoca, yo aquí soy la víctima.

Salgo del agua lo más rápido que me permite mi cuerpo, y como está tan distraída riéndose de mí aprovecho para recostarme en cima de ella y atacar esa linda boquita que no para de reír.

Sus labios me tientan todos los días, pero a ella le molesta que la bese cada vez que se me antoja, me he dado cuenta que ella es la culpable.

Su cuerpo empieza a calentarse y el roce de mi traje de baño mojado junto a su bikini no me ayuda a mantenerme sereno, no resisto más.

Mis manos cobran vida propia y recorren su cuerpo con descaro, ella empieza a apartarme, pero yo no quiero que me aleje, de hecho quiero todo lo contrario.

Pellizco su senos haciéndola gemir y disfrutando de ese hermosos sonido sigo gozando de su cuerpo.

-Jayden... Para... -ignoro por completo su petición y sigo torturando sus labios, en un acto imprudente le bajó la parte inferior del bikini y ella en ese momento me aparta de un fuerte empujón. -¡No soy una cualquiera Jayden! ¡Me reuso a hacerlo al aire libre y más aún sabiendo que tu familia y la mía están bajo el mismo techo!

-¡Pero yo en ningún momento sugerí que fueras una cualquiera! -¡las mujeres son un lio! ¿En que momento si quiera abrí mi boca?

-Me tratas como a una. -se da la vuelta y sin ninguna explicación, se va.

-¡ARGH! -sujeto mi nuca frustrado -¡En que momento yo la hice sentir así...!

-Hermano eres un calenturiento sin remedio -se burla Chester.

-¡¿Nos estabas viendo?! -que descaro, o es muy valiente o es muy idiota para confesar que estaba viéndonos en un momento tan íntimo.

-yo estaba tranquilo en la amaca y ustedes empezaron con sus cosas ¿sabes? mi hermosa cuñadita Indu tiene razón.

-Explicate -exijo.

-recuerda hermanito que ella no es de las mujeres fáciles que te follabas en los baños del estacionamiento, y ni hablar cuando te follaste aquella chica en el armario del conserje. Iac -saca la lengua con expresión de asco y me mira nuevamente serio. -Recuerda que es tu prometida y una señorita criada para quererte y serte fiel, no para ser tu juguete sexual.

Me ha dejado sin habla, tiene razón, mi hermano menor me ha dado una lección de vida, no podría caer más bajo que esto.

Supongo que debo disculparme, pero ¿cómo se supone que contenga mis ganas cuando ella está cerca, es inevitable no querer tenerla en mis brazos, esa mujer me seduce sin siquiera intentarlo.

Que frustrante.

Entro en la casa bastante frustrado y excitado, necesito solucionar esto, y no solo hablo de el problema que tengo con Sarisha, sino... Bueno.

Mi ahora notorio bulto.

Camino en dirección a la habitación, supongo que Sarisha estará ahí. Me da la sensación de que alguien me observa me doy la vuelta pero no veo nada fuera de lo normal sigo caminando y escucho una especie de llanto que provoca un escalofrío que recorre mi espina, me incomoda ese molesto llanto, busco al culpable y encuentro un pequeño infiltrado al pié de las gradas, cojo al animalito y de repente se me ocurre una, creo yo, buena idea.

Subo rápidamente con el gatito en brazos hasta mi habitación y entro sin tocar, por supuesto, no tengo el lujo de encontrar a mi prometida medio desnuda, pero, al menos está en bata de baño...

-Sarisha, sé que estas molesta conmigo, pero por favor, acepta a este inocente animalito como muestra de mis buenas intenciones contigo. -me mira dudosa y no sostiene al minino

-Es el gato que te hizo caer en la piscina ¿no? -¿esta cosa fue el culpable?

-Solo... Lo encontré dentro de la casa y creí que querrías quedartelo... -bajo la mirada de forma inocente, se que es caer bajo, pero no quiero perderla, y si tengo que usar a este gato para conseguirlo lo haré.

-Si de verdad quieres que te crea, no me tocaras hasta la boda. -sentencia con los brazos cruzados. En mi cabeza el gato y yo ya hemos saltado por el balcón...

-Sarisha para la boda faltan dos semanas...¿podrias ser más comprensiva? -entiendo que esté molesta, pero no es para tanto, no pienso aceptar semejante estupidez.

-Está bien Jayden has lo que desees -se da la vuelta y entra al baño, pone el seguro ni bien está dentro...

Se que esto no es bueno, no comprendo a las mujeres, pero si no me gritó..., es que algo va mal o simplemente no es de las mujeres que gritan por todo.

Suspiro frustrado, no entiendo por que esta mujer no entiende que la quiero en todo momento... En todas las formas posibles

La quiero...

Supongo que no estaba claro antes, pero ahora mi cerebro se ha dejado dominar por mi corazón, admití que la quiero y admito que es posible que la ame.

Pero ella aún no puede saberlo, creo, que estamos bien así por el momento.

☕🖤

Una hindú EnamoradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora