Cap#26

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Me levanté temprano en la mañana dejé la casa limpia y salí lo mas cubierta posible, incluso la cara, no me iba a arriesgar y dejar que mi padre me encontrara.

Fui a recorrer las calles de la capital, y  me di cuenta que a pesar de que crecí en India jamás llegué a conocer bien la ciudad en que nací, de hecho creo que no podría decir que quiero a Nueva Delhi, muchos llegan a conocer bien su ciudad, la aman y la defienden de extranjeros que no aprecian su cultura, yo por desgracia no tengo ese sentimiento. Las calles que recorro son totalmente extrañas para mi, nada de esto se me es familiar.

En el primer letrero que leo que se necesita trabajadora, me paro de inmediato y analizó un poco el lugar, es una carnicería... Bueno, cortar carne no ha de ser difícil.

—Lo siento no cuenta con la experiencia necesaria.

Resignada me disculpo por las molestias y me retiro. Me pidió que preseara un pollo y yo me quedé en blanco tuve que admitir que no sabía nada de carnicería... Seguí recorriendo los distintos lugares, me detuve en otro letrero y en este caso se necesitaba ayudante para una tienda de costura, entré de inmediato y demostré los conocimientos que tenia, no eran tan buenos pero a la señora le pareció aceptable mi nivel de costura, cuando me quite el manto para empezar a trabajar la señora abrió los ojos y me echó del lugar...

—¡Creeme niña te hago un favor este no es lugar para tí!

Exhale cansada y volví a cubrirme con el manto, así es, ni tiempo de ponerme el manto me dio. Camine por una media hora más y nuevamente encontré un letrero de "se requiere empleado" entre a la confitería y ni bien vieron que era mujer me dijeron que, ellos no contrataban mujeres, eso me pasó muy seguido a partir de ese punto. Supuestamente si contratas a una mujer corres el riesgo de que en un futuro te demande por acoso sexual o incluso puedes llegar a perder tu negocio, en mi opinión es ridículo. Pasé a distintos restaurantes para ver si alguien necesitaba camareras o una cocinera pero en esa rama laboral no había ninguna vacante. Miré el cielo y el atardecer me llegó de repente, no había llegado a almorzar a mi casa... Dahana me iba a matar y lo que es peor yo me había perdido, lo primero que pensé es volver por donde vine, y tratar de guiarme.

Aquí no estaba Danilo... No estaba Jayden... Ninguno para ayudarme a volver a casa.

Seguí pasando de calle en calle cruzando por callejones que ahora se veían oscuros, evadia los grupos de hombres que iban a beber o que tenía expresión sospechosa tuve el mayor cuidado del mundo, pero cuando ya no había ni un rastro de luz me recosté en un muro cerca a un enorme tacho de basura y me pare unos segundos a pensar...

¿Por qué tenía tanto cuidado?

¿Quién me necesitaba?

Si me ponía a pensar lo único que hacía era incomodar a mis hermanos y arruinarles un negocio a mis padres.

¿Y si mejor ya no trataba de volver?

Cuando me levante y pretendía buscar un lugar donde dormir, se abrió de golpe la puerta de la casa en la cual hace unos momentos estaba apoyada, de esta salió mi hermano me vió y corrió hacia mi, no me dijo nada solo me abrazo y empezó a llorar.

Entre sollozos me dijo

"creí que te había perdido"

Soy tan egoísta... Que me voy a quedar para arruinarle la vida a mis hermanos un tiempo más...

Mi hermano se calmó y me hizo entrar a la casa, me sentó en el comedor, se limpió las lágrimas y puso la cara más aterradora del mundo.

—¡¿En qué mierda estabas pensando?! ¡¿sabes lo preocupado que estaba?! ¡Estuve toda la maldita tardé buscándote! desde el momento en el que no te vi en la mañana salí a buscarte por todos lados y resulta que nadie te había visto. Fui puesto por puesto y una señora me dijo que había visto a una señorita cubierta con un manto buscando empleo. ¡¿dónde te habías metido?!

Una hindú EnamoradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora