Colorblind [KiriBaku]

B

15 años.

Había pasado un tiempo de sus primeros pensamientos hacia Katsuki Bakugo y de alguna manera que nadie explicaba o creía, había logrado entablar un tipo de amistad con él. 

Hacían prácticamente todo juntos. Desde entrenar a alejarse del grupo. Aunque mayormente era el rubio quien se alejaba y el teñido lo seguía, pero no importaba, al menos no lo alejaba.

  — Oye, cabello de mierda.— dijo Bakugou un día de la nada, habían llegado temprano a clases por lo que se encontraban solos en el salón.— ¿nosotros nos conocíamos desde antes?

La pregunta dejó perplejo a Kirishima, quien ladeó un poco su cabeza antes de negar un poco: — Debes estarme confundiendo con alguien más, Blasty.

— Voy a matarte si sigues diciéndome así.

— Ambos sabemos que no lo harás.— el pelirrojo le mostró su afilada dentadura en una amplia sonrisa con un toque divertido en la misma y en respuesta simplemente obtuvo un gruñido para que posteriormente comenzaran a llegar uno a uno todos sus compañeros. Pronto se encontró así mismo hablando con Kaminari, esperando a que su primera clase del día empezara.

— Entonces cuando iba llegando a mi casa ese perro empieza a ladrar, y justo cuando yo...— el relato de Kaminari se vio interrumpido al momento que Aizawa entró por la puerta y de un momento a otro todos estaban sentados, escuchando la nueva lección que pasaría por el día. 

Menos Eijiro Kirishima, que en cierto momento su mirada se dirigió a cierto rubio que miraba la ventana y por un momento, unos cortos y pequeños segundos, un sentimiento de familiaridad le recorrió el cuerpo y recordó las palabras dichas de su parte anteriormente. "¿y si nos conocemos desde antes? Nah, lo recordaría."

Esos pensamientos fueron descartados al momento que vio que Katsuki Bakugou de repente miraba en su dirección con una ceja alzada como si estuviera preguntándole con la mirada por qué mierda lo estaba mirando. Lo único que atinó a hacer fue evitar su mirada con rapidez, sintiendo cómo de repente todo su rostro se teñía del mismo color que su cara y por ese momento realmente odió saber cómo era el color rojo.