No more {Justin Bieber} SIN EDITAR

•Capítulo 12

-¿Justin?

-No, tu madre...- dijo rodando los ojos.

Otra vez no, por favor. Hice un puchero con mis labios y estos temblaron levemente.

-Mierda...- susurró- Lo siento.

Dejó las bolsas en el suelo y me abrazó lentamente, pasando sus brazos repetidamente por mi espalda, acariciándola.

-¿Me has estado buscando?- pregunté separándome de él.

-Si, pensaba que ibas a hacer alguna tontería como la otra vez.

-Para mi no es una tontería, aún me cuesta tu bipolaridad...

-¡Yo no soy bipolar!- gritó.

Me estremecí y debió de notarlo- Lo siento, solo... déjame tiempo y te explico todo.

Le miré desconfiada y con miedo, cogí unas cuantas bolsas del suelo y caminé hasta la salida, Justin cogió las demás que quedaban y andando llegamos al coche.

Apretó el botón para desbloquearlo y metimos todas las bolsas en el maletero, una vez que estábamos acomodados, partimos rumbo a casa en un silencio incómodo.

Las calles pasaban borrosas a nuestro alrededor, Justin aumentaba la velocidad respecto más cerca estábamos de casa, pero no tenía ni la menor idea del por qué.

-Justin, más despacio, por favor- rogué con mis manos sujetas al cinturón de seguridad.

No respondió y cuando llegamos a su casa paró de un frenazo el coche, haciendo que me fuera hacia delante.

-Estas loco- Le miré sorprendida y bajé asustada del coche.

Corrí al maletero sacando las bolsas que pude y corrí hacia la entrada, tras varios minutos vino con las demás en sus manos y abrió la puerta tranquilamente.

Subí las escaleras tras él y entramos en mi habitación, dejó las bolsas encima de mi cama y salió del cuarto dando un portazo. ¿Qué le pasa?

Ordené la ropa interior en los cajones del vestidor y la ropa la colgué en las perchas, los zapatos abajo en fila.

Una vez todo colocado, di un suspiro con las manos en mi cintura y salí del vestidor cerrando la puerta.

¡Mi móvil! Lo saqué de la mochila de clase que se encontraba en el suelo y bajé apresurada las escaleras rogando que Justin estuviera en el salón.

Casi me resbalo en éstas pero por suerte llegué al primer piso intacta, casi corriendo entré en el salón, pero no había ninguna presencia.

Fui a la cocina, tampoco estaba.

Subí escaleras arriba y al estar frente a su habitación, toqué a su puerta tres veces.

-¿Qué quieres?- contestó de mala manera.

-¿Puedo pasar?

-Que sea rápido.

Abrí la puerta y vi a Justin sobre su cama azul oscura tumbado boca abajo con sus pies hacia arriba y mirando la pantalla de su móvil.

-¿Qué quieres?- dijo tecleando algo.

-Me.. ¿Me podrías dejar algún cargador para mi móvil?

Dejó de escribir y me miró con sus dos cejas alzadas -Claro.

Se levantó dejando su móvil en la cama no sin antes bloquearlo y fue a su mesilla, situada al lado de su cama y sacó un cargador blanco.

-Ten- me lo tiró y lo cogí en el aire.