Confía en mí (Editando)

Capítulo 21

Bueno, no tengo que sentirme mal. Lucas lo va a entender. Es mi mejor amiga. Tengo que hacerlo, no tengo otra salida.

Respiré profundo y me metí en la ducha. Recuerdos de lo que había pasado con Lucas me acorralaron, pero traté de evadirlos. Tenía que pensar en cómo insinuarme y hacerle comprender lo que quería.
Espero que me entienda y quiera hacerlo.

Tenía que pensar una forma que sea sutil y tierna, tampoco podía tirarme encima de él y violarlo.

Entonces, pensé en hacerlo en forma tal que él se dé cuenta de que lo había planeado, pero que quería que sea lo más natural posible.

Parecía una loca teniendo un brote psicótico, pero no tenía otra opción.

Después de tanto pensar, la inspiración vino a mí y tuve una idea: iba a fingir confesarle a Lucas que estaba enamorada de él y que ya no podía mantenerlo en secreto. Y en ese momento, que pase lo que tenga que pasar.

Me sentía la peor persona del mundo por hacerle esto a alguien tan bueno como él, pero no podía soportar esto. Yo sé que va a saber entenderme y vamos a encontrar a Ana, sacando a Leo de nuestras vidas para siempre.

Salí del baño, y miré mi celular. Tenía mensajes nuevos, entre ellos, uno de un número desconocido.

Núm. desconocido: Tik tak, tik tak...

Mierda. Apreté fuerte mis labios.

Eva, 20:58: Acepto.

Envié el mensaje y mis manos comenzaron a temblar, pero iba a tener que controlarme.

-¿Estás lista?-Preguntó levantándose.

-Lucas, estoy en bata de baño.-Respondí.

El sonrió. Se acercó a mí lentamente sin dejar de mirarme. Le devolví la sonrisa y comencé a acercarme.

-No importa.-Dijo.

Mi celular sonó, anunciando un nuevo mensaje.

-Es mi mamá, tengo que contestar.-Mentí. Me metí al baño con el celular y cerré la puerta rápidamente.

Escuché un gran suspiro por parte de Lucas y luego maldijo en voz no tan baja, tirándose a la cama y subiendo el volúmen del televisor; que dudo esté entendiendo algo, está todo en ingles y hablan muy rápido.

Abrí el mensaje demasiado nerviosa.

Núm. desconocido: el primer día que llegues a Buenos Aires, que por cierto es martes, te espero en esta dirección a las 5:30 p.m.

Y había un link de Google Maps adjunto.

Eva, 21:06: está bien.

Respiré profundo. Mañana en la noche lo haría, no podía perder más tiempo.

Salí del baño y elegí mi ropa. Hacía frío, entonces opté por unos jeans negros y un polerón de lana beige, con botas rojas cortas.

-Ahora sí, vamos.-Dije.

Lucas apagó el televisor y agarró su campera negra que estaba colgada en una de las perchas dentro del gran armario blanco de la habitación.

Salimos del hotel y yo no había pensado a dónde podíamos ir. Lucas dijo que sabía de un lindo lugar con vista a la Estatua de la Libertad, yo accedí sin cuestionar mucho, solo quería salir y distraerme.

Tomamos un taxi, ya que estaba bastante lejos aparentemente. Estuvimos alrededor de 40 minutos en el auto, hasta que llegamos a nuestro destino. Bajamos y miré a mi alrededor bastante confundida.