[Terminado] «StrangeSlytherin»

La marca tenebrosa

Abrí los ojos con dificultad e instantáneamente vi los verdes ojos de Harry clavados a los míos. Agarraba mi hombro y me zarandeaba. No sabía muy bien porqué, hasta que me di cuenta que el profesor Snape me miraba mientras los alumnos reían a carcajadas. Estaba en clases de pociones. Me había quedado dormida pero el sueño con Voldemort era tan real que podía oler su asqueroso aliento. Estaba confundida. Miraba a los alumnos reírse. Todos reían, menos Draco, que miraba serio a su cuaderno, como si nada estuviese pasando.

Snape mandó silencio. Las risas de los alumnos cesaron.

-5 puntos menos para Slytherin, gracias a la señorita Walker. -Dijo Snape con una sonrisa maliciosa mientras se dirigía, de nuevo, a la pizarra.

Estaba vergonzada. Además de quedarme dormida, había perdido otros 5 puntos para mi casa. Perdian por mi culpa.

Harry estuvo el resto de clase pendiente a mi. Le preocupaba algo.

Cuando la clase terminó, me dirigí a uno de los baños de las chicas. Era grande y muy luminoso.

Me senté encima de la tapadera del WC y pensé en mi vida antes de entrar a Hogwarts. Vivía antes en una mentira, pero aún así, prefería vivir así.
Aquel momento en el baño era raro, tenía ganas de llorar, de soltarme pero no podía, se resistía.

Oí que alguien entraba en el baño. Caminaba rápido y torpemente.

Después de unos 5 minutos de respiración acelerada, se alejó del baño. Salí y me situe frente el espejo. Estaba horrible. Estaba despeinada, tenía bolsas bajo mis ojos y tenía los labios agrietados. ¿Que e hecho? ¿Que e hecho? - Me preguntaba, una y otra vez.
A través del espejo vi a Harry, no lo escuché entrar. Parecía haber estado corriendo, ya que jadeaba y sudaba. Di media vuelta, mirándolo, sin decir una palabra. Él tampoco decía nada. Se acercó a mí.

-Ilie, ¿Estas bien?

Negué con la cabeza.

Fui hacia el y lo abracé.

-No, no estoy bien, Harry.

Harry me acariciaba el cabello.

-Dime lo que pasa, Ilie.

Negué, otra vez, con la cabeza.

-Ilie, solo quiero ayudarte. Déjame hacerlo.

Una lágrima se derramó de mi ojo, rodando por mi mejilla.

Agarré la manga izquierda de mi túnica y de un rápido movimiento la subí, dejando ver la marca tenebrosa.

-Aver como arreglas esto, Potter. -Dije mientras me alejaba de el, llorando, desconsolada.

Vi la decepción en sus verdes ojos antes de que diera media vuelta y sin decir nada, desapareciera por la puerta del baño.