Muchas veces pienso que dejarte ir fue lo mejor, una parte de mi se siento más en paz al haberlo hecho, pero al mismo tiempo otra se disputa esa sensación. Pienso que todo podría haber concluido de una forma distinta, pero ya es demasiado tarde. La decisión fue tuya, ha terminado de esta forma porque así lo has querido.
Recuerdo el día que te vi por primera vez, era una pequeña niña sentada junto a sus padres en una cena aburrida para niños de nuestra edad. Estabas en una esquina muy solitaria sin alguna expresión en tu rostro, llamo mi atención que un niño como yo estuviera solo y no se moviera en lo absoluto. Mi madre me pillo observándote, me alentó para acercarme a ti y presentarme. Tu inexpresión me hizo dudar por unos minutos, pero termine por acercarme.
-Hola -salude animada
-Hola -respondiste serio
-¿Por qué estás solo?, ¿En dónde están tus padres? -solo me observabas sin emitir palabra alguna. Siempre he sido una persona a la cual no le gusta ser ignorada, el no recibir respuesta tuya me molesto, así que decidí retirarme y no molestar más.
Regrese con mi madre en silencio, voltee hacía atrás con la esperanza que tuvieras alguna expresión en tu rostro, pero para mi sorpresa ya no estabas en ese lugar. Puedo jurar que cambiaste de lugar porque pensabas que te seguiría molestando con mis preguntas.
Puedes llamar destino o mis padres, pero un mes después volvimos a reencontrarnos y debo declarar que, en el lugar menos indicado, éramos los únicos niños en medio de tantos adultos. Luego de que fuera terriblemente ignorada por él decidí que no sería yo la que en esta ocasión cruzaría alguna palabra con él. Permanecí la mayor parte de la velada junto a mis padres, en silencio y obedeciendo a todo lo que me pedían sin realizar alguna objeción justo como me habían enseñado.
-Hola -saludaste serio. Me asombro el que en esta ocasión fueras tu el que iniciará la conversación, pero aun así no olvidaba el desplante anterior -¿No sigues molesta por la última vez o sí? -seguí en silencio -¿No me hablarás? -silencio total. Al no obtener respuesta alguna no hizo más preguntas y se mantuvo alejado el resto de la noche.
Esas dos noches solo fueron el inicio de lo que sería una larga y tomentosa existencia, nuestros padres iniciaron a ser muy cercanos e iniciamos a compartir destinos vacacionales juntos. En donde sea que se encontrará un Mitchell ten por seguro que un Blower estaría junto a él. Su amistad fue creciendo justo como la nuestra, nos complementábamos en formas inexplicables.
No me sorprendió en absoluto que años más tarde nuestros padres decidieran confesar que estábamos comprometidos en matrimonio desde hacía años atrás y era momento de comprometernos y dejar cualquier relación que tuviéramos. Al inicio no estaba de acuerdo, pero no podía protestar ante esto es una pelea que no ganaría y no gane.
En ocasiones pienso si tomamos la decisión correcta, realmente ¿valió la pena el arriesgar todo por probar un ápice de "Libertad"? ¿Seriamos más felices si hubiéramos aceptado nuestro destino en silencio? Probablemente no, no seríamos felices, pero al menos tendríamos algo de paz.
Durante nuestra relación tuvimos días buenos y malos, eran más los días malos que buenos, siempre falto el componente necesario para hacerlo funcionar y que por más que nos esforzásemos nunca pudimos conseguir. Una vez una persona me dijo que cuando dos personas deciden tomarse un tiempo para luego intentarlo de nuevo solo hay dos salidas, tienen la oportunidad de dejar atrás sus errores y renovar los sentimientos que tienen el uno por el otro o es la comprobación que necesitan para darse cuenta de que son más felices al estar separados.
Me parece algo curioso que solo haya dos caminos, nuestros tiempos eran indefinidos. No nos amábamos, pero tampoco nos sentíamos bien ante el hecho de estar separados.
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¿Qué pensaste que sería de mí? +18 COMPLETA {Cazadores 1}
Mystery / ThrillerSelfish, égoïste, εγωιστικός, önző, selvopptatt o egoísta. La misma acción en distintos idiomas y algo que todos compartimos. Muchas veces la única forma de sobrevivir es siendo egoísta. Cuando inicie a planear que es lo que quería para mi vida jamá...