EXTRAS +1 »¡Lucha!«

2.8K 242 163
                                    

Cómo recuerdan, la misión en la que Milo y Camus fueron juntos yo no relate exactamente qué sucedió ni quién era el enemigo, pero acá ya lo sabrán ✨👀

No olviden que en esta línea de tiempo Milo aún 'odia'  a Camus. Además, el personaje y las técnicas que coloque yo misma las inventé, así que no se extrañen (? Weno no, la verdad es que tomé referencias xd

•❅──────✧✦✧──────❅

Ambos ya se encontraban cansados luego de un largo recorrido dentro del bosque sin obtener respuestas. Siguieron el rastro del débil cosmos por unos cuantos minutos más, pero justamente cuando lograban tener una pista importante, volvía a desaparecer.

Camus fue el primero en detenerse, seguido del griego.

—¿Ahora qué? ¿No me digas que ya estás cansado?— sonrió burlón.

Chasqueó la lengua, molesto.

—Idiota, no hables mucho que tú también— replicó.

—Si seguimos haciendo paradas nunca vamos a llegar a nuestro destino, ¿Lo sabes, verdad? Andando.

—Nos están tendiendo una trampa, detente.— Milo se giró a él, esperando una respuesta— Están jugando con nosotros.

Guardaron silencio, esperando un sonido, una presencia, algo. Tratando de verificar en qué momento se les presentaba el tipo detrás de todo eso, porque no eran tan tontos para no saber qué ya debían estar siendo vigilados por algo, o alguien.

—Me parece estúpido qué...-

—¡Milo, cuidado!

Demasiado tarde, en un abrir y cerrar de ojos aquel tipo que se había mantenido oculto y muy ocupado jugando con los dos, se hizo presente. No esperó mucho para lanzar el primer ataque al que se le presentara primero. Y desgraciadamente ese fue Milo, quién, al tomarlo completamente por sorpresa no pudo reaccionar a tiempo, y para su desgracia su espalda impactó sobre una filosa roca tras él.

Camus inmediatamente se colocó en posición de combate, girándose a la entidad. Lo curioso de todo es que no estaba por ningún lado.

—¿Quién eres? ¡Muéstrate de una vez miserable!— gruñó enfadado, mirando a ambos lados.

Aún un poco aturdido por tremendo golpe, Milo se puso en pie, apoyándose sobre el suelo un instante.

—¿Atacar al enemigo mientras está distraído? Qué patético— sonrió, como siempre. Porque no le importaba en lo absoluto que segundos atrás estuviese en desventaja, aún así no dejaba ese lado prepotente, y más cuando se trataba de su presa.

—No lo provoques, Milo— anunció— Es mejor estar alerta.

Camus quedó un poco más adelante, observando cuidadosamente los pasos de su contrincante. No entendía exactamente quién era, y porqué estaba ahí.

—Vaya, qué lindo eres—. Una voz le hizo virar casi de inmediato a la dirección del Escorpio. Entonces, finalmente se dejó ver.

Un chico que no aparentaba más de veintiún años estaba frente a Milo, observándolo como si éste fuese la octava maravilla del mundo. Por su parte, Camus no podía mirarle el rostro porque estaba de espaldas, pero a juzgar por su figura era bastante bello, para no decir que tenía una figura bastante femenina. Su cabello era de un ligero tono plateado cobrizo, largo y ondulado, portaba una especie de túnica negra que cubría completamente su cuerpo, y justo en la cintura, un cinturón café que podía recalcar perfectamente su escultural cuerpo.

Amor sin Devolución ✿[MiloxCamus] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora