Los meses se fueron volando, y cuando me di cuenta ya habían pasado más de 2 meses. En todo este tiempo nunca me percaté de la presencia de las cámaras, sin embargo ahí estaban. Nuestro programa debería salir al aire dentro de 1 mes.
-Vaya, voy a extrañar esta casa- Dijo Lisa, quien estaba sentada en las piernas de Yoongi.
Lisa y Yoongi habían vuelto a ser pareja, pero esta vez su relación no era tóxica. Yoongi se había vuelto mas dulce y cariñoso con Lisa y ella ya no le exigía tanto, ya que sabia que le costaba expresar sus sentimientos hacia ella. El plan de Lisa nunca fue llevado a cabo.
-Yo también- Hice un puchero- En unos años quiero buscar una casa como esta y mudarme.
-Tal vez deberíamos sugerirle al manager que nos consiguiera una casa de playa- Dijo Lisa riendo.
Yo también reí.
Tae se reunió en la sala con nosotros. Me saludó con un beso en la frente.
-Deberíamos ir a un bar hoy- Dijo Lisa.
-Apoyo la idea- Por fin habló Yoongi.
-Esta bien- Dijimos Tae y yo al unísono.
-Ok, ¿a que hora?- Lisa se levantó del regazo de Yoongi.
-¿9:00?- Sugerí.
Todos estuvieron de acuerdo y se fueron a sus respectivos cuartos, menos Tan, quien entro a mi habitación conmigo.
-Tal vez deberías mudar tus cosas a mi habitación, ya que nunca estas en la tuya- Dije con sarcasmo.
-Tal vez- Dijo y me abrazo por la cintura. Dejo besos en mi mejilla y en mi nariz.- El doctor tenia razón, tu nariz está mas bonita- Dejó otro beso en mi nariz.
-¡Oye!- Fingí estar enojada.
Tae besó mi sueño fruncido.
-Lo siento princesa, no te enojes- Dejó un pequeño beso en mis labios.
A diferencia de otras parejas que se van distanciando conforme pasa el tiempo, Tal y yo teníamos una relación mas cariñosa conforme pasaba el tiempo, nunca creí posible amarlo mas, pero con cada caricia que me daba, mi amor por el aumentaba.
-Ve a tu habitación, necesito arreglarme- Ordené.
Tae hizo un sonido de molestia y abandono mi cuarto.
Me di una ducha y me puse un atuendo casual.
Sabía que a Tae no le gustaba que me vistiera muy provocadora.
Salí de mi habitación y toque la puerta de mi novio. Al cabo de unos minutos Tae abrió. Tenia una toalla rodeando su cintura y el pelo mojado. Se veía tan sexy. No pude evitar sonrojarme al verlo así.
-Pasa- Abrio la puerta y yo entre. Me senté en su cama.
Tae comenzó a quitarse la toalla con la intención de cambiarse ahí mismo frente a mi.
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Mi ángel guardián (editando)
FanfictionAquella sonrisa, su sonrisa, era capaz de hacer brillar hasta el cuarto más oscuro. Aquella sonrisa, fue capaz de hacerme brillar de nuevo.