//CAPÍTULO 29\\

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Comencé a correr por toda la casa de alegría. Lisa celebró conmigo. Ambas estábamos dando pequeños brincos.

-Debemos celebrar esto- Dejó de brincar y puso cara pensativa.- Lo se, vamos al karaoke.

-¡Si!- Fui a mi armario a buscar ropa que ponerme. Me detuve.- Espera ¡Tengo que decirle a Tae!- Corrí a la cama donde estaba el teléfono.

Tecleé con las manos temblorosas por la emoción. Encontré el contacto de Tae y presioné el botón de llamar. Se escucharon varios tonos y me mando al buzón de voz. Supongo que tendré que decírselo mañana.

Me cambié y me fui con Lisa al Karaoke. Ella ordenó alcohol y yo un jugo de frutas. La única desventaja de estar embarazada es que no podría tomar cerveza. Cantamos hasta quedarnos sin voz.

Terminamos nuestra pequeña celebración a las 2:00 am. Por miedo a que alguien nos secuestrara llamamos a Sehun para que nos recogiera. Llegó unos 10 minutos después de que habláramos con el. Se metió al karaoke por nosotras. Nos saludo con un beso en la mejilla a cada una.

-¿Por que estás Tan sonriente T/N?- El también sonreía.

-Digamos que...Ocurrió algo maravilloso.- Froté mi panza.

Sehun abrió los ojos como platos y su sonrisa se ensanchó. Se acercó a mi para abrazarme y felicitarme. El trayecto a casa fue tranquilo. Sehun nos dejó en la puerta de el edificio y se despidió con la mano.

Ambas nos fuimos a la cama sin siquiera cambiarnos la ropa. Estábamos demasiado cansadas.

El sonido de mi celular me despertó temprano en la mañana.

-T/N apaga eso- Dijo Lisa con voz adormilada.

Me levante y fui a la sala a ver quien me llamaba. Tae. Tomé mis audífonos y conteste la videollamada.

-Hola- Dije en voz baja.

-Hola princesa- Parecía activo, seguro se había despertado temprano para ir a ensayar.- Lamento no haber contestado tu llamada ayer, me quedé dormido.- Soltó una pequeña risa que me hizo sonreír.

-Tranquilo.

-Bueno de que querías hablar.- Se acomodó en la silla en la que estaba sentado.

-Espera un momento.

Deje mi teléfono en la sala y me dirigí al baño a tomar la prueba de embarazo. Volví a la sala y tomé mi teléfono. Tae me sonrió.

-Te tengo una sorpresa- Dije para luego acercar la prueba al teléfono.- Al parecer dios nos dio otra oportunidad.

Los ojos de Tae se abrieron exageradamente. Pude ver como varias lágrimas de felicidad caían de sus ojos.

-Te amo- Dijo y luego comenzó a reír mucho.

-Y yo a ti- Seguimos hablando sobre nuestro futuro hijo.

-Tengo que irme a ensayar princesa, te llamo luego- Me mando un beso y colgó.

Me sentía eufórica, tenía otra oportunidad para tener un hijo, y esta vez no la voy a desperdiciar.

Lisa me acompañó al doctor en la tarde. La recepcionista nos dijo que podíamos pasar y me encontré con la cara sorprendida de el doctor. 

-T/N ¿A que debo el placer de verte de nuevo?- Estrecho mi mano y luego la de Lisa.

Ambas tomamos asiento enfrente de su escritorio.

-Parece que estoy embarazada de nuevo- Una sonrisa escapó de mis labios mientras veía mi vientre.

-Qué maravillosa sorpresa- El doctor sonrió.- Vamos a hacerte un chequeo.

Me hicieron pruebas de sangre, en las cuales Lisa casi se desmaya, y confirme que estaba embarazada. Durante el ultrasonido pude ver a mi Segundo hijo, un pequeño frijol negro.

Le pedí el doctor la foto para enseñársela a Tae cuando regresara de su gira, o esta noche por videollamada

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Le pedí el doctor la foto para enseñársela a Tae cuando regresara de su gira, o esta noche por videollamada.

El doctor me recetó vitaminas especiales para prevenir lo qué pasó la última vez. Nos despedimos de él y volvimos a casa. Me di un baño lento en la bañera. Agregué una bomba de baño que había comprado al salir del consultorio. Deje mis manos afuera de la bañera y pude ver la cicatriz que había en mi muñeca. La ignoré como siempre hacia. Me quede dormida en la bañera.

No estoy segura de cuanto tiempo pase ahí pero Lisa me despertó diciendo que Tae me estaba llamando. Conteste la videollamada y pude ver como se sonrojaba al verme casi desnuda, con el agua cubriéndome.

-Hola oppa- Le dije riendo.

-Hola hermosa.- Soltó una risa nerviosa.- ¿Como estuvo tu día?

-Fui con el doctor.- Hice una pausa.- Tengo la foto del primer ultrasonido ¿Quieres ver?

El asintió.

-Espera un momento, me iré a cambiar y vuelvo.- Corte la llamada y salí de la bañera para secarme y vestirme.

Me puse mi pijama y volví a llamar a Tae. Estaba sentada en la cama con el sobre del ultrasonido en mis piernas. Contestó después de unos tonos.

-Hola de nuevo- Estaba con su sonrisa cuadrada, me hizo reír.

Saque la foto de el ultrasonido y se la enseñé. Su sonrisa se ensanchó. Pude ver a un padre orgulloso. Las lágrimas asomaban de sus ojos.

-Traes tu anillo puesto- Dijo después de una larga pausa.

Mire mi mano que tenía el anillo.

-¿Por que me lo quitaría?- Le Sonreí.

Se limitó a reír. Alguien lo llamo.

-Tengo que irme, iré a cenar con los chicos. Te amo- Colgó y yo Seguí con mi sonrisita estupida.

Mi ángel guardián (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora