//CAPITULO 23\\

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Era 30 de diciembre. Me levante de la cama cuidadosamente para no despertar al hombre a mi lado. Me metí al vestidor y me puse ropa deportiva. Salí en el auto a la pastelería más cercana, pero antes de eso pasé por uno de los mejores amigos de Tae, Jungkook. De camino me sentí un poco mareada, pero ya era normal eso.

-¿Entonces cual es su pastel favorito?- Le pregunté a Jungkook mientras cruzábamos la puerta de la pastelería.

-Chocolate- Me sonrió.

Ordenamos un pastel de chocolate con la inscripción: Feliz Cumpleaños Kim Taehyung.

Fuimos al centro comercial mientras hacían el pastel. Con todos mis ahorros pude comprarle a Tae una camisa de su marca favorita, Gucci, aunque ese no iba a ser el único regalo que iba a recibir de mi parte.

Después de una hora regresamos a la pastelería y nos llevamos el pastel a la casa de Jungkook, el plan era llevar a Tae ahí por la noche para su fiesta sorpresa.

Tae aun no había despertado cuando regrese así que me puse la pijama de nuevo y me recosté a su lado.

Pasaron las horas y Jungkook me llamo diciendo que todo estaba listo. Le dije a Tae que subiera al auto y se vendara los ojos. Tomé la bolsa de regalo que tenía su camisa y una pequeña cajita que tenía su otro regalo.

Me subí a la camioneta y puse sus regalos en el asiento trasero.

-¿A donde vamos princesa?- Pregunto emocionado.

-Es una sorpresa- Tomé su mano.

Después de unos 10 minutos llegamos a la casa de Jungkook. Ayude a Tae a bajar del auto y a entrar a la casa. Todo BTS y BLACK PINK estaban ahí. Le quite la venda y todos gritaron:

-¡SORPRESA!-

Tae me miró con cara de sorpresa y me dio un beso, seguido de esto fue a abrazar a todos los presentes. Estuvimos conversando un buen rato y luego Jungkook me ayudo a llevar el pastel a la sala. Tae soplo las 23 velas del pastel y sonrió ampliamente.

-¡Hora de los regalos!- Gritó Hobi animado.

Todo el mundo comenzó a darle sus regalos y yo fui por los míos al auto. Escondí la cajita en mi bolso, quería que fuera el último regalo que abriera. Regrese a la casa y espere mi turno de darle la camisa. El la abrió con gran entusiasmo y me dio un beso en la mejilla como agradecimiento. Todos terminaron de darle sus regalos y comenzaron a recoger las bolsas y envoltorios de regalo.

-Esperen- Dije agitando mi mano- Yo tengo un regalo más.

Tae me miró confundido y compartí una sonrisa cómplice con mis compañeras, quienes eran las únicas que sabían que era ese regalo. Saque de mi bolsa la pequeña caja y se la entregué. Desanudo el moño y abrió la caja, frunció el ceño al no saber que significaba aquello.

-Abre el pergamino- Le dije un poco nerviosa, no sabía si le gustaría.

Abrió el pequeño pergamino que estaba dentro de la caja también. Sus ojos se iluminaron. Saco la prueba de embarazo que se encontraba en la caja.

-E-Entonces, esto significa, que...- No terminó la frase ya que las lágrimas comenzaron a surcar sus mejillas.

Me abrazó fuertemente y yo también comencé a llorar.

-Feliz cumpleaños papá- Le dije con la voz entrecortada.

Se separó de mi para ponerse en cuclillas y besar mi vientre que estaba un poco hinchado.

-Seremos padres- Dijo Tae con una felicidad incontenible.

Me beso apasionadamente. Las lágrimas de alegría seguían saliendo de sus ojos.

Todos nuestros amigos nos felicitaron, en ese tiempo Tae nunca me soltó y seguía acariciando mi barriga. El sería un gran padre.

Regresamos a casa a la media noche. Tae seguía sonriendo ampliamente y besándome de vez en cuando. Nos cambiamos y nos recostamos en mi cama.

-¿Me concederías un último regalo de cumpleaños?- Acaricio mi mejilla.

-Lo que tú quieras amor.- Le Sonreí dulcemente.

-Cásate conmigo-

Mi ángel guardián (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora