Unas semanas habían pasado desde que hicimos el amor por primera vez con Taemin. Ese día fue el mejor de toda mi jodida vida. Taemin se había entregado a mí, y yo a él, y ese hecho me hacía enormemente feliz.
Claro que las cosas se habían dificultado para ambos, ya que desde que nuestro vínculo se terminó de fortalecer, la necesidad de estar juntos, de besarnos, de tocarnos, de sentirnos, solo había aumentado, al igual que la sed por la sangre del otro. ¡Joder! Cada vez que recordaba el dulce sabor metálico de su sangre, la boca se me hace agua y siento que mi garganta arde dolorosamente.
Mi entrenamiento como futuro líder iba viento en popa, en pocos días ya había aprendido casi todo lo que necesitaba, y Taemin sabía de todo esto. Siempre lo mantenía informado de mi progreso, y realmente adoraba la forma en que él me daba su ánimo y su apoyo.
Tenía la puta esperanza que en un futuro él estuviera gobernando a mi lado, aunque eso lo veía demasiado lejano, gracias a sus padres. Por supuesto que él ya había aceptado estar conmigo pasara lo que pasara, pero no podía evitar preguntarme hasta dónde sería capaz Taemin de llegar por lo nuestro. ¿Sería capaz de enfrentar a sus padres una vez llegado el momento? La verdad es que no quería saber la respuesta a esto.
En este tiempo nos habíamos visto cada vez que podíamos. Frecuentábamos mucho la casa del lago que descubrí. Habíamos pasado muchas noches allí, besándonos, abrazados, platicando sobre nosotros o haciendo el amor. Taemin era increíblemente sexy y había descubierto una nueva faceta de él en la cama. ¡Dios! ¡Las cosas que hacíamos a veces! Pero yo haría cualquier cosa para complacerlo, incluso si fueran locuras totales.
Iba pensando en todo eso mientras me dirigía una vez más al lago. Íbamos a encontrarnos una vez más allí. Además, habían pasado unos días desde que nos habíamos alimentado y lo necesitábamos.
Una vez salí del denso bosque al lago, un paisaje hermoso se mostró ante mí. La luna estaba reflejada en el lago, la brisa era refrescante y podía escuchar diversos sonidos provenientes de varias direcciones. Volví mi vista hacia la cabaña y vi que había luz en ella, lo que significaba que Taemin ya estaba ahí.
Pero algo llamó mi atención a medida que me acercaba más a la cabaña. Había ropa tirada cerca de la orilla del lago. Era la ropa de Taemin. Me paré frente al lago y comencé a buscarlo con la mirada, hasta que lo encontré. Él estaba de espaldas a mí, en medio del lago y parecía que estaba disfrutando su baño nocturno. Tomé su camisa del suelo y la acerqué a mi nariz, oliendo toda su esencia en ella. Vainilla. Siempre olía a vainilla. Sonreí ante esto y volví a dejar su camisa en el suelo.
—¿Vas a estar ahí parado solo viéndome toda la noche o vas a entrar al agua conmigo? —Por un momento me sobresalté, porque creí que no se había percatado de mi presencia. Su voz sonaba juguetona, y tenía una sonrisa ladeada cuando volteó el rostro hacia mí.
—¿Es eso una orden? —Pregunté en el mismo tono juguetón.
—Sí, es una orden. Ven al agua conmigo, Minho. —Estiró su mano hacía mí, llamándome para llegar hasta él.
Mentiría si dijera que ese lado mandón de Taemin no me gustaba, porque ¡Infiernos! Me encantaba cuando se hacia el dominante conmigo. Me quité toda la ropa y la dejé junto a la de él. Avancé hasta él, sin apartar mis ojos de los suyos y el rubor se apoderó de su cara. No entendía como lograba sonrojarse todavía, después de todo lo que hemos hecho juntos, pero esa faceta inocente de él me encantaba tanto como sus otras facetas.
Cuando estuve lo suficientemente cerca, tomé su mano y lo atraje hacia mí. Lo tomé de su cintura y me apoderé de sus labios. Había extrañado sus besos y su tacto. Me separé de él, para mirarlo a los ojos y sonreírle.
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Vampire Heart... {2Min}
FanfictionChoi Minho, único hijo y heredero legítimo del clan Choi, Gobernantes supremos del mundo vampírico. Lee Taemin, hijo menor del clan Lee, quienes quieren arrebatarles el poder a los Choi al precio que sea. ¿Pero qué sucede cuando el destino es capric...