away - hyunmin

dix-huit

SeungMin no asistía al colegio desde hacía ya dos días, los profesores estaban un tanto confundidos ya que el joven no había faltado nunca a lo largo de todos esos años de colegio, pero el que más sentía era su ausencia era un joven morocho que tenía un tic nervioso en la pierna que no lo dejaba desde hacía ya varios días.

—¿Cómo va el departamento? —ChangBin tomó un cigarrillo y lo prendió inhalando un poco de este—. ¿Tu padre...?

—Bien, el departamento ya lo puedo habitar y estoy comenzando a llevar todas las cosas de mi habitación, ya están la cama y el armario allí tengo que llevar mi ropa y mi mesa de luz —El
mayor asintió mientras miraba el cielo—. Gracias por dejarme estar en tu casa.

—Si no fuera por ti no tendría casa Jinnie, así que no agradezcas, mi casa es tu casa —El
menor le sonrió mientras prendía también un cigarrillo—. Te puedo ayudar a llevar cosas o prestar ¿Tiene sillones?

—No, solo una heladera y un lavaropas, planeaba comprar algunas cosas con el dinero de mamá —Suspiró y le dio otra calada al cigarrillo—. Quería llevarme a Kkami...

—Chocolate por la noticia, creo que me odia —Ambos rieron—.

—Ella extraña a mamá... y a mi, no te odia —El mayor hizo una mueca—. Debo conseguir un trabajo, no puedo gastar el dinero en adornos necesito alimentos y demás.

—Los meseros no reciben mucho pero puedes trabajar en dos lugares distintos —El menor asintió ante la información—. Puedo preguntarle a JaeBum, me dijo que conocía a un chico que trabajaba en un restaurante.

—Gracias, no se que haría sin ti —Ambos se sonrieron y el mayor terminó si cigarrillo tirando la colilla al suelo—. Iré a terminar de vaciar mi habitación.

—¿Dónde queda el departamento?

—Cerca de lo se SeungMin —El silencio se hizo presente y la tensión tomó lugar entre ambos, cada vez que se hablaba del menor el ambiente no era agradable—. No me responde los mensajes.

—Tal vez le puedes pedir a Jinyoung...

—Claro si porque no se darán cuenta de que yo era el del hospital —Seo rodó los ojos—.

—HyunJin, Jinyoung puede hacer que pases cuando sus padres no estén —Hwang lo miro sorprendido—.

—Nunca lo había pensado... Gracias, le hablaré ahora luego de llevar todo al departamento —Se saludaron con un choque de puños mientras se iban para lados distintos—.

[*]

    SeungMin estaba en la biblioteca leyendo tranquilamente, eran cerca de las 23:45 p.m. y el sueño estaba comenzando a hacerse presente, los moretones ya se habían calmado y alguno estaban casi por irse pero aún se podían notar manchas de un frío tono en su piel y antebrazos. Miro su celular que había comenzado a sonar -ya que tenía una alarma para la mejor hora en la que se debía poner las cremas en la piel- y se levantó lentamente, camino por la gran mansión solitaria hasta la cocina, tomó algunos tarros que estaban en un estante apartado y luego volvió a su pequeño escondite.
     Alguien golpeó la puerta por lo que algo temeroso y confundido se dirigió a esta y la abrió lentamente.

      —Oh, JinYoung ¿Sucede algo? —SeungMin lo miro un tanto sorprendido por la repentina aparición del mayor—.

       —Tiene visitas —Kim frunció el ceño—.

       —Yo no invite a nadie y tampoco recibí la notificación de que alguien fuera a venir, lo tengo altamente prohibido y lo sabes ¿Quién es? —El mayor miro el suelo sin responder—. Park, dime ahora ¿Que está pasando?

       —Mmm... un amigo, vino a verlo —SeungMin pensó en ChangBin, pero por más que fueran amigos el mayor nunca se había demostrado tan cercano ni preocupado por el y la última opción...—.

      —¿Está Hwang aquí? —Las piernas y voz del menor temblaron al pronunciar ese nombre—. Dile que se vaya.

      —Lo siento, creo que realmente deben hablar —Park estaba siendo muy curioso y metido para los gustos de SeungMin—.

       —No eres quien para meterte en mi vida Park, eres el chofer., nada más, y sabes muy bien tú posición en cuanto al trabajo, ahora vete y dile a HyunJin que se vaya.

       —Si señor, lo siento —Kim no dijo nada, observo como el mayor se alejaba y se volteó para cerrar la puerta pero alguien fue más rápido impidiendo que cierre la puerta y abrazándolo con fuerza—.

        —Lo siento —La grave voz de HyunJin se escuchó a sus espaldas, en un bajo susurro, el más alto lo apretaba fuertemente, impidiendo que se pueda mover, y no pudo pasar mucho tiempo hasta que los ojos de SeungMin comenzaron a nublarse con lágrimas—.