Wen Ning busca de un lado a otro a SiZhui. Se supone que ya debió haber regresado. Preocupado, decide ir a la oficina de Madame Mo para avisarle que no encuentra a SiZhui por ningún lado.
Se detiene frente al cuarto del menor, abre la puerta y se horroriza al ver a SiZhui en la esquina totalmente desfigurado, mojado y algunas partes de su cuerpo descuartizados. Apenas y se puede notar que es un humano. La piel blanca del muchacho se regenera lentamente y el pobre niño suelta algunos gemidos de dolor.
—No... no mires... n-no mires...
A SiZhui no le gusta que nadie lo vea regenerarse. Wen Ning pide disculpas y cierra la puerta apresurado y avergonzado al ver tal escena. Sabe que muchos clientes que ven a su amigo son para poder liberar sus fetiches más oscuros y salvajes. Pero cree que esta vez se han pasado con él.
Wen Qing ha tenido muchos clientes de todo tipo, incluso chicos vírgenes e inexpertos que buscan perder su virginidad y sentirse hombres. Pero este sujeto sólo terminó llevándola a cenar mientras coquetea con ella. O eso parece, pues él tiene otras intenciones con ella, pero no de forma sexual o de buscar un romance, pero de que algo quiere, lo quiere. ¿Qué será?
— ¿Qué buscas en realidad? No soy tonta. Algo quieres de mí y no es sexo.
El desconocido se bebe toda la copa llena de alcohol.
—Bueno, te daré más dinero si me cuentas lo más raro que has visto.
—Tú eres lo más raro que he visto en mi vida. Un Omega que viste como Alfa.
—Y tú eres una Alfa que viste como Omega.
—Es así mi trabajo. Las prostitutas debemos lucir nuestros cuerpos.
— ¿Y no te gustaría irte de ese mundo?
Lo mismo de siempre, realmente es la misma plática que tiene con hombres que termina enamorada. Promesas, promesas falsas.
—Muchas gracias por la cena. Me retiro.
—Espera, espera, necesito que me ayudes con algunas cosas.
Wen Qing se burla de él.
— ¿En qué te puede ayudar una puta como yo?
—Hay un rumor sobre un prostituto que es un Beta.
La Alfa trata de que no se note sus nervios. ¿Quién fue el idiota que divulgo sobre la existencia de SiZhui?
—Los Beta son existen.
— ¿De verdad? Me interesa mucho. Es muy peligroso si llega en los odios del líder de la secta Wen.
— ¿Por qué te interesa?
—Te conviene responderme.
— ¿O vas a matarme?
—No, te pagare si sólo me hablas de ese Beta. ¿Quién es, su edad, cómo llego ahí?
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Los ángeles también lloran.
RomanceUna profecía muy vieja, dicta que un niño (un Beta), hijo de los mejores cultivadores y de dos varones dará fin al clan Wen, asesinando a su líder actual y destruirá el Sello del Tigre, un amuleto que por siglos se encuentra perdido y todos lo busca...