NARRAS TÚ
Había llegado el momento, las clases habían acabado y teníamos que reunirnos en aquella sala.
-De verdad que no quiero que vengáis, es uña estupidez- dije suplicándoles.
Ellos hicieron caso omiso de lo que dije, y me dijeron que nos se iban a rendir por miedo. Nos dirigimos hacia donde nos citaba aquella nota. Draco me agarró la mano, estaba serio, decidido a enfrentarse a lo que fuese.
Llegamos a la pequeña sala utilizada como almacén. Neville y Draco se pusieron delante nuestra y abrieron la puerta. La sala ahora mismo era muy grande, habrían utilizado un conjuro para agrandar lugares para que no resultase tan agobiante estar tantos en un lugar tan pequeño. Entramos todos en la habitación, decididos y con la cabeza bien alta, dispuestos a ser valientes. Las puertas de cerraron de golpe y las luces de encendieron. Y allí estaban Pansy, Greengrass Crabbe y Goyle. Draco estaba furioso, quería ir a pegarles pero le frené agarrándole del brazo.
- Muy bien, pensaba que no ibais a ser lo suficientemente valientes -dijo aplaudiendo- solamente os hice venir aquí para que veíais como ponemos las fotos en el gran comedor, lugar donde todos lo podrán ver. Cuando Blaise aparezca con el hechizo para hacer estas fotos mucho más grandes, las colgaremos por toda la sala, y vosotros contemplaréis cómo lo hacemos, sin poder hacer nada.
Y justo en ese momento, salieron lazos del diablo de varios armarios estacionados en la sala (son plantas que te atrapan y no te dejan salir, aparecen en la primera película).
-¡COBARDE! - Gritó Draco. Sus palabras estaban llenas de odio, mientras todos intentábamos movernos para poder salir de allí.
- ¡ ESTAS ENFERMA! - Dijo Neville rojo de rabia.
- Ahhh, sii - dijo ella con tono amenazante- CRUCIO - dijo lanzándome el hechizo.
El dolor era insoportable, no podía moverme, las lagrimas salieron de mi.
- AHHHHH, P-POR FA-VORR AHHHH - grité suplicándole que parase.
- NOOO, _____ - Gritó Luna desesperada? Intentando liberarse.
- PARA, por favor, a ella no le hagas nada - dijo Draco suplicando muy serio, estaba muy preocupado, pero quería mantener la compostura para que no descubriesen su punto débil.
- Pararé si me besas- dijo Pansy mientras se acercaba mucho a Draco.
Yo me moría del dolor, no dejaba de gritar. Pansy comenzó a besar apasionadamente a Draco. Estuvieron bastante tiempo besándose, pero no me importaba, me dolía demasiado. Después del beso ella retiró el hechizo. Yo todavía seguía llorando, estaba muy dolorida.
- Estás bien- dijo Draco mirándome cariñosamente.
Yo asentí, todavía seguía débil. Al instante llego Blaise.
- Biennnn, ahora podré ver vuestro sufrimiento, menos mal, me estaba aburriendo - dijo Pansy riéndose maliciosamente, junto con sus tres compañeros.
-Eres un cobarde y un impostor- le dijo Draco a Blaise. Este último no se inmutó, estaba serio, su cara no expresaba sentimiento alguno.
Blaise le dio un papel a Pansy, donde estaba el hechizo para hacer las fotos de la altura de una persona. Yo tenía muchísimo miedo. Todos estábamos asustados. Draco comenzó a hacer mucha fuerza para liberarse, pero fue en vano. Pansy recitó el hechizo en alto varias veces para practicarlo. Hasta que lo realizó. Todos nos esperábamos que las seis fotos que tenía en la mano se hiciesen enormes, pero no pasó nada de eso.
Al instante apareció Dumbledore, parecía que se había teletransportado.
-Pansy, Crabbe, Greengrass, Goyle... creo que tenemos que hablar- dijo Dumbledore muy serenamente, mientras con un hechizo, hizo desaparecer las plantas.
- Pe-pero - dijo Pansy apunto de llorar- BLAISE TAMBIÉN PARTICIPÓ EN ESTO - Gritó fuera de si.
- Lo dudo señorita, él fue el que mi hizo venir aquí. - dijo mirándole con cara de aprobación, mientras él sonreía.
Todos estábamos flipando, de un momento a otro todo había cambiado. Estábamos algo doloridoa y nada más salir de las plantas Draco se acercó hacía mí corriendo para comprobar que estaba bien. Todos nos abrazamos, muy aliviados y todavía algo asustados.
Dumbledore y los cuatro capullos integrales se fueron de la sala. Blaise estaba de pie y sin moverse, mirando a un punto fijo.
-¿Por qué decidiste ayudarnos? - le dije con la voz más dulce que me salió en ese momento.
Él me miró sorprendido, mientras que nosotros cuatro le mirábamos con atención.
- La verdad... Yo nunca estuve de su parte. Me sabía todos sus planes malévolos. Draco, cuando te encerramos en esta sala el día del baile, yo fui quien puso la varita debajo del armario para que pudieses salir, además de evitar muchísimos otros planes con excusas que se me ocurrían al momento. Pero para este plan no valían excusas ya que nadie me creía, así que decidí ser yo el que iría a por el hechizo, para avisar a Dumbledore y que esto se acabase de una vez por todas. -dijo muy serio y con algo de tristeza en su mirada. - Ahora podéis creerme o no, eso depende de vosotros, pero quería dejar claro que nunca os haría daño, y nunca te traicionaría- dijo mirando a Draco.
Todos nos miramos perplejos. Su historia era muy convincente, se le veía arrepentido, y si fuese mentira no delataría a sus compañeros ante el director. Decidimos que le creeríamos.
- Te vamos a creer- dijo Neville con una leve sonrisa dibujada en el rostro. Blaise sonrió y sus ojos tenían un pequeño brillo.
Draco se levantó y se puso delante de él. Le miró durante unos segundos y después le abrazó. Me encantaba ver esa escena, ellos dos fueron amigos desde siempre, parecían hermanos, entonces estaban muy felices por encontrarse otra vez.
- Tengo una idea, ¿y si para olvidar el día de hoy nos vamos fuera del castillo con algo de comer mientras pasamos un buen rato?- sugirió Luna. La idea nos pareció perfecta.
Un rato después
Blaise era muy agradable. Estuvimos riendo toda la tarde. Fue genial. Si os digo la verdad, creo q Blaise va a acabar integrándose por completo en nuestro grupo en muy poco tiempo. Le contamos todo lo que nos sucedió desde que nos conocimos, que Draco y yo somos pareja, y que Neville y Luna empezaron a serlo hace poco. Teníamos todos muchas cosas en común. Él también nos contó muchas cosas sobre su vida, por qué odiaba a Pansy y mil cosas más. La verdad, es que el día fue horrible al principio y demasiado genial al final.
Llegó la hora de despedirnos. Blaise tenía que hacer deberes en la biblioteca junto con Neville (os dije q habíamos cogido muy rápido confianza) así que Draco y yo decidimos acompañar a Luna a su sala común después de que se despidiese de su pareja y de su nuevo amigo. Nosotros también nos despedimos, y después de acompañar a Luna nos quedamos Draco y yo solos.
Él se dispuso a besarme, y yo me aparté coqueta.
-Annnnda, ahora te has vuelto traviesa- me dijo con una sonrisa.
- Pues si- dije riéndome y con una cara pícara.
- Pues tendré que castigarte -
