Esa noche había sido genial, Draco y yo dormíamos abrazados después de una noche increíble. Sus padres no iban a estar hasta dentro de bastantes días, así que teníamos tiempo para hacer la fiesta.
Sería esta misma noche. La celebraríamos en el inmenso jardín de los Malfoy, el cual gracias a varios hechizos ingeniosos y eficaces, logramos convertir en una discoteca preciosa (foto en mis historias)
Estuvimos toda la mañana con las preparaciones, era invierno así que procuramos que aquel establecimiento decorado y diseñado por nosotros fuese lo más cómodo y calentito posible.
Después de elegir colores, muebles y canciones, nos dispusimos a escribir y mandar las invitaciones. La verdad es que invitamos a muchísimas personas. Así la fiesta sería mucho más dinámica y no excluiríamos a nadie.
Cerca de la hora de comer, nos tomamos un descanso, y para nuestro alivio vinieron nuestros tres amigos a ayudarnos con todas las preparaciones. Deberíamos haber empezado antes, pero entre unas cosas y otras...
Neville y Blaise se encargaron de las bebidas, Draco y yo de la comida y las luces, y Luna dijo que le encantaría pensar nuestros looks. La verdad es que nos solucionó la vida porque después de tantas cosas que nos quedaban por hacer no teníamos tiempo para elegir la ropa.
Trabajamos sin descanso para que cada pequeño detalle estuviese perfecto. La verdad es que hicimos un gran trabajo. Nunca vi un lugar de fiesta más bonito que este. Además de grande era precioso.
La fiesta comenzaba sobre las once de la noche y eran las nueve y media, así que decidimos que era buena hora para comenzar a vestirse.
Después de ducharnos (no tuvimos complicaciones ya que esta mansión estaba repleta de lujosos y espaciosos baños) cada uno se dispuso a probarse los conjuntos que Luna había elegido para nosotros.
Los chicos, resumiendo, tenían pantalones vaqueros de un color oscuro, ya sea negro o azul muy apagado, con una camisa o camiseta blanca. La verdad es que estaban muy guapos.
Sobre todo Draco, nunca le había visto con vans ni una camiseta blanca y holgada de ralph lauren. Iba genial vestido.
El vestido de Luna era impresionante, blanco con brillantes. Tenía unas mangas muy especiales. Se había alisado el pelo y recogido en una trenza. Iba espectacular.A mi sin embargo me preparó un look que consistía en una falda de cuero y un top dorado de tirantes, acompañado de varios complementos. Estaba preciosa, nunca me había visto tan guapa.
Ya estábamos todos listos, así que decidimos ir bajando y poniendo la música y las luces, con bastante volumen, para que las personas que iban llegando supiesen donde era la fiesta.
-Estás preciosa- Dijo Draco muy sincero y serio. Me lo decía totalmente embobado.
Yo le saqué de su estado de loco perdido enamorado, dándole un tierno beso en los labios, quien continuó muy cariñosamente.
Después de un tiempo la gente comenzó a llegar, y sin darnos cuenta, toda la inmensa estancia estaba repleta de gente bailando y riendo.
Durante la noche conocimos a muchísima gente. Saqué a mis amigos a bailar al centro de la pista, ya que al principio estaban algo cortados. Después de risas, bailes y algo de alcohol por el medio, todo pasó a ser muy divertido. Luna y yo no parábamos de bailar al son de la música gritando y cantando. Cogí a Blaise de la mano, y le di un par de vueltas alrededor de si mismo. Noté como una sonrisa se le dibujaba en la cara.
-Gracias por aceptarme tan rápido, a pesar de todos los problemas que he causado- me dijo todavía bailando, mientras los gritos y la música no cesaban.
-siempre supe que seríamos grandes amigos, te vi algo diferente en aquellas personas- él me dedicó una sonrisa, y al instante Neville Luna y Draco se acercaron a nosotros y bailamos y reímos en grupo. De pronto apareció Cho bailando con alguna de sus amigas, y animamos a Blaise para que la sacase a bailar. Todos gritamos y victoreamos cuando, cansado de nuestras obligaciones, accedió a acercarse a ella. Eran tal para cual, estuvieron bailando y riendo. Se les veía muy felices.
Estuve bailando con Neville un buen tiempo, mientras Luna y Draco hablaban en la barra. Gracias a Neville soy como soy, feliz alegre y positiva. Él es un hermano para mí, una persona que me ayudó a expresar cada sentimiento y a querer ser feliz. Estar con él bailando y riendo era algo demasiado genial. De pronto las luces se pusieron de un tono más tenue, y la música popera que había estado sonando a lo largo de la noche, dio lugar a una lenta. Luna había sido la encargada de esto. Neville me agarró de la cintura, y mientras nos movíamos, comentábamos entre risas como muchas personas estaban nerviosas porque era su primer baile con una persona especial. Además nos percatamos de lo nervioso que estaba Blaise mientras bailaba con Cho.
De pronto noto como me dan un delicado beso en el cuello.
-¿Puedo robártela un segundo?- pregunta Draco caballeroso.
-Por su puesto, yo tengo que ir con mi dama- dijo Neville sonriendo mientras se dirigía hacia Luna.