Me dio un beso en el cuello, y me llevó al centro de la pista. Agarró mi cintura delicadamente, y yo rodeé mis brazos al rededor de su cuello. Él se acercó mucho a mi y me sonrió. Nos movíamos la compás de la música. Estábamos muy juntos, notaba como las mariposas agitaban sus alas en mi barriga.
- Estás demasiado buena- me dice sensualmente.
- ¿Y tú no estarás borracho?- digo riéndome al tiempo que acercó aún más mi cuerpo al suyo.
- Nahhhh, bueno igual un pelín de nada- dijo lo último exagerando sus tambaleos.
Él se acercó hacia mi, ahora serio y me besó las labios apasionadamente. Yo le seguí, parecía que nuestro mundo se acababa y era nuestro último beso. La pasión fue subiendo. Al rato, Draco me cogió de la mano y me llevó a uno de los baños de la discoteca. Una vez allí, le volví a besar, y me subí encima suya, rodeando mis piernas sobre su torso, y juntando mi feminidad con su miembro. Él se mordió el labio mientras me apoyaba en el lavabo. Le iba a quitar la camisa, cuando de repente escuchamos varios gemidos. Podréis pensar que es algo normal en una fiesta, es más, lo íbamos a hacer nosotros, pero esa voz nos sonaba familiar.
Draco y yo pensamos lo mismo, asentimos y silenciosamente nos fuimos acercando hacia la puerta de donde venía aquella voz familiar. Draco debido a que había bebido algo de más, tropezaba de vez en cuando y hacía algo de ruido. Abrimos la puerta decididamente, no podíamos aguantar más, teníamos que saber de dónde provenía aquella voz.
Nada más abrirla nos quedamos atónitos. En el baño de mujeres (pegado al baño de hombres en el cual nosotros estábamos) estaban Harry Potter, un chico de Gryffindor al que había visto alguna vez en el colegio y Cho Chang. Notaba como la rabia subía por mi cuerpo, ¿cómo le pudo hacer esto a Blaise? Nuestro amigo había estado muy enamorado de ella, la trataba genial y cuidaba cada mínimo detalle para hacerla feliz. Pero hay gente que no sabe valorar eso.
-Emm.. ¿hola?- dijo Harry algo ruborizado. Él no tenía la culpa, supongo que no sabría nada de Blaise.
-Mierda... n-No es lo que pa-pa-parece- dijo Cho mientras se cubría su cuerpo con la ropa.
- ¿Cómo te atreves? - preguntó Draco desafiante, mientras Harry se vestía. -Eres una desagradecida, no sabes valorar lo que tienes ni lo que hacen por ti.
Draco tenía toda la razón. Además sé que se estaba controlando porque alguna vez me había comentado que su relación con este chico (Harry) no era muy buena. Notaba como miraba rabioso a la pareja.
-No le hables así a mi novia- dijo Harry, sin entender por qué Draco le había dicho todo eso, mientras se acercaba hacia él bastante furioso.
- Mira Potter, no quiero tener problemas contigo ni con nadie, pero tu novia es una zorra que te ha puesto los cuernos con mi mejor amigo, así que deja de mirarme con esa cara de superioridad de mierda, y comienza darte cuenta de la verdad. - Le contestó Draco, mirándole muy serio.
- DIOS PUEDES DEJAR DE AMARGARME LA VIDA- Gritó Harry a punto de llorar de ira.- Siempre supiste que me gustaba ______, es más, te lo dije aún cuando nos llevábamos a muerte para dejártelo claro, pero a ti te dio igual. Ni si quiera me dio tiempo a dirigirle la palabra. Y ahora que al fin tengo novia, y que llevamos bastante tiempo, vienes a decirme todo tipo de mentiras y de barbaridades. ¡¿QUE MIERDA PRETENDES HACER?! Se que te caigo mal pero quiero que me dejes en paz.- cuando Harry acabó de decir eso, cada una de sus palabras retumbaban en mi cabeza, no entendía nada. ¿Le había gustado? Aunque no me dio mucho tiempo a reflexionar sobre el monólogo de Harry, ya que Draco comenzó a hablar otra vez, ahora en un ambiente mucho más tenso.
-Cuando me dijiste que te gustaba _____, yo ni si quiera la conocía. Un día coincidimos en un castigo, y desde entonces algo surgió entre nosotros. ¿Tú sabias que eso es inevitable? Los dos sentíamos atracción, el sentimiento era mutuo, y nos quisimos desde el principio. Hemos vivido muchas experiencias juntos, conocido a personas y somos inseparables. Con toda esta mierda quiero decir que no fue mi culpa todo esto, no es algo que pudiese evitar. Y a lo segundo, no tengo ningún motivo para querer mentirte, es más, me das sumamente igual y no quiero saber nada de ti. Si e lo digo es porque he aprendido a ser mejor persona y te estoy ayudando pese a nuestras dificultades. Si no quieres ver que tu novia es una puta, no es mi problema. - Draco borracho habla genial xd. Se notaba que cada una de sus palabras estaban llenas de sinceridad. Cho estaba completamente callada.
Pero al instante todo se torció...
