Cansada.

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Día 3:

-Odio esto, de verdad, odio mucho esto. Odio a Elenek por mis buenos modales. - dijo Helga molesta en su auto yendo por Arnold. Él le insistió que iría caminando ya que su coche se había vuelto a echar a perder pero ella le dijo que iría por él.

-¡Arnold! - gritó enojada desde el coche.

Repitió el grito unas diez veces y Azul salió de casa.

Menuda suerte.

Azul tenia un lindo vestido rojo de tirantes y debajo una blusa de manga larga blanca, su cabello corto brillaba con el sol de la mañana.

-Buenos días. ¿Qué deseas? -preguntó.

Helga bajo del auto y fastidiada se quito los lentes de sol. Ese día iba con un simple pantalón de mezclilla algo roto y un suéter corto rosa.

-Vine por tu novio. Nos citaron a las 9 por un loco asesino de mujeres así que si puedes decirle que baje. Supongo que eres Azul. -

-Supones bien.-

-Me alegro ¿Puédes llamarlo? Se nos hará tarde y...-

-Él no irá contigo ¿Helga? -

-Si. -respondió fastidiada.

-Veras, me acompañará a la escuela y luego... -

-Buenos días Helga. Veo que ya se conocieron pero las presento formalmente. Helga, Azul, Azul, Helga G. Pataki. Ahora, Helga llevaremos a Azul y luego vamos a ese lugar. -dijo sonriendo cínicamente.

Arnold vestía pantalones de mezclilla negros y una playera de a cuadros azul. Helga supuso que luego iría a trabajar.

-¿Qué?-Pregunto Azul ofendida y Helga enojada al mismo tiempo.

-Cabeza de Balón... -comenzó la rubia.

-No le llames así. -le dijo mordazmente Azul.

-¿Qué onda contigo, pueblerina? -contestó algo fastidiada.

-Helga... - acusó Arnold.

-¿Qué? Ella se está metiendo conmigo. Viejo, no quiero problemas. ¡Azul eres novia de mi ex de hace diez años! espero entiendas que él no me interesa y que solo hablo y convivo con él porque el asesino de mi hermana se quiere entregar pero antes nos quiere ver sufrir ¿hacemos las paces y te llevo a tu trabajo? -

Azul enojada vio a Arnold amenazante y regresó la vista en Helga y todavía seria asintió.

-Entiendo y espero logren encontrarlo. Voy por mi bulto. Gracias. -

-Eso fue muy maduro de tu parte. -comentó Arnold sonriendo.

-Callate, zopenco. Debiste avisarme que tendría que hacerle de chófer a tu noviecita. No sé que pasó por tu mente.-

-Te dije que yo iba sólo pero insististe. -

Cuando Helga iba a contestar sarcásticamente vio una cabellera rubia salir de la Casa de Huéspedes.

-¿Helga Pataki? -

-Señor Shortman. Buenos días. -saludo seria con miedo a que Arnold se diera cuenta que ya se habían visto antes cuando Miles le pidió ver al donador millonario de los Ojos Verdes.

-Buenos días, señorita. ¿Arnold no vas a presentarnos? -

-Pero parece que ya la conoces papá. - comento extrañado.

-En fotos y tu abuela me hablaba de ella pero no formalmente. - Arnold la volteo a ver y Miles le guiño un ojo haciéndola sonrojar.

-Helga, te presento a mi papá, papá, Helga Pataki.-

Regresando A Hillwood.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora