Regresando A Hillwood.

Misterio Misterioso.

-Misterio Misterioso ¿quién es el que anda en las calles a toda hora esperando?-

-Eso es fácil, Gretel, el Hombre Mono. -

-Misterio Misterioso. -

-¿Que hacen aquí? -

-Señor, solo venimos a jugar. -

-Váyanse, no es seguro. -

-Si, señor. -

Las niñas corrían empujandose y riendo.

-Misterio Misterioso ¿quién mato a la hermana de la Chica Rosa? -preguntó una.

-Tu sabes que yo no sé, nadie lo sabe. -

-Ay, hermana... ¡Castigo! - reían. 

Él solo las veía alejarse.

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-¡Brainy, Jason! - saludo abriendo la puerta - No se ven muy contentos ¿qué paso? -

-Helga tenemos que ir a casa de Arnold. La carta nueva nos sitúa en la casa. Ahí tenemos que estar ahora. -

-¿Cómo? Son las once... 11:30 ¿qué significa...? -

-Hay una carta en el buzón de Arnold. Pero no podemos moverla o algo malo pasa. Tienen secuestrada a una joven llamada Lisa Caspor. -

-Pero...¿Por qué? -

-No entendemos nada. - respondió Jason.

-Deja me pongo una chamarra. -

Entró y corrió a su habitación, se reviso en el espejo, traía unos pantalones de pijama azules y una blusa normal gris. Se puso una chamarra blanca y bajo.

-¡Bob, voy con Brainy! -

-¿Por qué? -

-Regreso en un rato,no te preocupes.-

-¡Helga! - pero Helga ya había salido.

-Vamos.-

Se subió en la parte trasera y en menos de un minuto llegaron a la casa de Huéspedes. Arnold los debía de estar esperando porque les abrió.

-Conozco a la muchacha era niña exploradora y, y... -

-La ayudaste en algo. - termino Helga.

-Entren, hay chocolate caliente. -

Los guió a la cocina y ninguno se sentó .

-Soy Azul. - se presentó la novia.

-Jason Corp. -

-¿Chocolate caliente? -

-¿No tendrás café? - preguntó Brainy.

-Yo si acepto el chocolate, gracias. - contestó Helga.

Helga si se sentó cansada y Arnold se sentó al otro extremo de la mesa.

-Buenas noches, niños. - saludo el abuelo entrando.

-Buenas noches. - respondieron casi todos.

-Phil. - respondió Helga.

Phil volteo la cabeza y sonrió emocionado, se acerco y abrazo a Helga.

-Regresaste, jovencita de una ceja.-dijo emocionado.

-Si, Phil, tranquilo. -

-¿Qué pasa? -

-¿No lo sabe? - se dirigió a Arnold.

-¿Saber que? -

-Nada abuelo. -