XV

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Narrador.

Derek estaba que el mismo podría decir que salía humo por sus orejas.

Todo el día había estado presenciando el como Alberto estaba todo pegajoso con Stiles, lo que le provocaba celos.

Ahora mismo ya eran las seis de la tarde.

Derek esta camino a casa de Stiles, planeaba dejar a ambos humanos, para que descansaran, y los vería el lunes.

– Servidos...

Dijo Derek frenando en frente de la casa del menor de los Stilinski.

– Gracias....

Dijeron ambos.

Alberto bajo primero, stiles se quedó quieto.

–Stiles...ya llegamos...

Stiles lo volteó a ver y dijo.

– Oye...Derek...
– ¿Que pasa?
– Me preguntaba...si...
– ¿Que cosa?

Dijo con un gesto de interés.

– ¿Acaso...tenia novio...o novia?

Y eso hizo que los nervios de Derek se encendieran un poco.

– Ah...no lo recuerdo...fue hace tiempo....pero creo que si...

Dicho eso sonrió.

– ¿Por que sonríes?
– Por que , eso quiere decir que si te importa la manada...
– Mas bien...tengo curiosidad...nos vemos Derek, cuidate...
– Tu...

Stiles cerró la puerta, para cuando iba a terminar la frase.

– También...

Puso una cara algo triste , vio como el contrario entró en la casa. Encendió el auto y conduce a su departamento.











– ¿Y que dijo?

Preguntó Scott.

– Bueno, no me hecho de ahí...
– Genial, eso...¿quiere decir que estamos avanzando?
– ...Se puede decir...que si...















El lunes.

Stiles estaba corriendo por los pasillos.

Se le había hecho tarde, y Alberto no se molestó en despertarlo.

Así que...henos aquí.

– Buenos días alumnos...

Vio a los chicos y no había nadie.

– Diablos...

Miró el reloj de su brazo derecho.

– ¿8:20?

La regla de los diez minutos.

– Ay...¿por que?

– ¿Por que "que"?

Stiles se exaltó y se giró, para encontrarse con.

– ¿Derek?, ¿que haces aquí?

El pelinegro ríe y dice.

– Bueno...sobre eso, alguien de la manada vino a solicitar empleo aquí...yo lo vine a acompañar , mi turno es hasta las tres...

Stiles suspiró.

– Bien, ¿gustas hablar?, mi clase se fue por la tonta regla de los diez minutos...
– ¿En serio?, esa regla existe desde que mi generación iba en el penúltimo año...
– ...Solo sientate, ¿quieres?, solo tengo hasta las diez...
– ¿Por que tanto?

Preguntó Derek tomando una banca y sentándose en frente del escritorio de Stiles, el cual ya se había sentado.

– La primera hora doy clase , a la segunda, la tengo libre...pero hoy me quedé dormido...
– ¿Y Alberto?
– Llegó antes...

Y hablando del rey de Roma.

– ¡Stiles!

Stiles miró a la puerta furioso.

– ¿Por que no me despertarse Al?, mira mi aula...
– ¿Que?

Stiles gruñó, se levantó para ir hacia el y dijo.

– Esta vacía, se suponía que hoy vería las ecuaciones mas complejas del semestre...la semana que viene serán los ínter semestre...y quiero que mis jóvenes salgan bien...

Alberto rió y dijo.

– Lo siento, pero pensé que seria gracioso...

De pronto se puso serio.

– Además...todo el fin, estuviste muy agitado, incluso, para alguien como tu, eso es mucho , y se que te fuiste a dormir tarde, para no decir que te dormiste hasta las dos...dormiste...

Alberto miró su reloj y dijo.

– Casi seis horas...no es mucho, pero es algo...

Stiles se sonrojó un poco, pues era cierto lo que dijo.

– Cre-Creo que tienes razón, perdón por gritarte...
– No te preocupes...además , me tengo que ir, adiós...

Dijo dándole un abrazo rápido.
Cuando se separó dijo.

– Nos vemos en el almuerzo...

Y se fue.
Stiles sonrió y volvió a su asiento.

– Lamento que hayas tenido que ver eso...pareciera que fueremos novios...

Rió por su propio comentario, que no fue nada gracioso para Derek.

– Je, no te preocupes...¿y de que quieres hablar?

Stiles se puso serio.

– Sobre...lo de antes del accidente...¿que relación teníamos?

Dijo mirando fijo a Derek.

– Ah...bueno, eramos algo así como....amigovios...
– ¿Amigovios?
– Si, eso...tu diste el termino, para que sintiéramos que eramos algo, pero que...aun no estábamos para eso...
– Entonces...¿que cosas hacíamos?

Derek se llevó una mano a su cuello, por la parte trasera y dijo.

– Bueno, salíamos juntos, nos abrazabamos, nos besábamos...entre otras cosas, lo único que no paso entre nosotros, fue sexo...

Stiles suspiró de alivio y dijo.

– Que bueno...pero bueno...¿me amabas?
– Si...por supuesto...y lo sigo haciendo...

Dijo riendo.
Pero de inmediato se cubrió la boca.
Stiles se sonrojó.

– ¿E-En serio?

Derek...se tensó un poco y dijo.

– Oye...me debo ir, debo encontrar a mi amigo...

Dijo Derek antes de salir.

– Pero dime...

Se fue.

– Mas...

Suspiró fastidiado y se puso a arreglar unos papeles.

– Tonto lobo...

Y rió.




Una vida común para nada comúnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora