— Necesitamos a Namjoon. — Taehyung rompió el silencio— Namjoon no está en disposición de venir y lo sabes, Tae. — Habló el mayor de los seis mientras auxiliaba los oídos de Jimin, los cuales habían sangrado por tal desgarrador grito.
Observaba detalladamente a Dae, quien estaba recostada boca arriba sobre mi cama, aún inconsciente y me perdí en su dulce rostro, ¿acaso era real? Una pequeña sonrisa apareció en mi rostro al ver a tal hermoso ángel estando en paz.
— No es que esté en disposición, Jin, ¡el chico tiene que venir! — Yoongi me había distraído de mis pensamientos. — ¡Namjoon probablemente sea el responsable de la esquizofrenia de la niña! ¡Quizás le causó un trauma de pequeña! ¿sabes?
— Créeme que eso no es esquizofrenia. — Habló Jimin.
Yoongi giró los ojos. — Como sea, digo. ¡Te reventó los tímpanos!
— Se regeneran, Yoongi, tranquilo. — Respondí yo, defendiendo a Jimin.
Mi mirada se dirigió hacia Hoseok, quien estaba sentado en el suelo abrazándose a sí mismo, no había salido una palabra de su boca desde lo ocurrido.
— ¿Qué sucede, Hoseok? — Caminé lentamente hacia él sentándome a su lado.
— Yo... yo no había escuchado un grito como ese desde hace años.
Eso llamó la atención de todos, incluyéndome. Los chicos dejaron de hacer lo que anteriormente hacían— discutir— y se acercaron lo suficiente hacia nosotros.
— En el siglo VIII aprendí algo sobre la mitología Irlandesa e incluso la viví, las Banshees han formado parte de estas desde hace muchísimos años. — Tragó saliva.
— ¿Qué carajo es una bansí? — preguntó Yoongi.
— Banshee, imbécil. — Tae y Jimin comenzaron a reír al escuchar cómo Jin había corregido de una manera muy agresiva a nuestro amigo peliblanco.
— Las banshees son espíritus femeninos que, según la leyenda, se le aparecen a una persona para anunciar con sus llantos o gritos la muerte de un pariente cercano. — Noté cómo los alegres ojos de Hoseok comenzaban a cristalizarse cada vez más. — Sé todo esto porque una de ellas predijo la muerte de mi madre. — Finalmente rompió en llanto. — Y no pude hacer nada para salvarla.
Bajé la mirada hacia las manos de Hoseok, este las tenía cerradas formando un fuerte puño.
— Gritan por que las voces de su cabeza se lo piden, gritan y anuncian la tragedia, la desgracia. Gritan en dolor y en pena. Y lloran de impotencia al no poder hacer nada, al no poder evitarla. — Le dolía recordarlo, sus lágrimas bajaban lentamente por sus mejillas, las cuales limpié.
— Entonces una de ellas, ¿se te apareció? — Tae moría de intriga y se veía desde muy lejos.
Hoseok solo asintió con la cabeza. — Estaba de cacería con mi antigua manada, se me apareció justo de frente. Era vieja, con cabello largo y blanco, uñas exageradamente largas y llevaba un vestido largo en pleno invierno. Al igual que el grito de Hei, dolió como la puta madre. — Limpió sus lágrimas y soltó un gran suspiro. — Solo que yo no sabía de qué se trataba, pero ahora que lo sé, cuídate Jungkook.
— Que yo sepa, no tengo seres queridos aquí. Entonces, ¿por qué vino hacia mí?— Pregunté con los ojos abiertos de par en par, obviamente, alarmado.
— Dae Hei está en proceso de transición. — los seis nos sobresaltamos al escuchar la voz de Namjoon en el marco de la puerta. — Estás fuera de peligro, Jungkook, o alguno de nosotros. El efecto de la mordida está dando sus frutos. — Namjoon se adentró más a la habitación. — Aquel ataque que sufrió por mí hace muchos años cuando vivía con ella y nuestros padres es lo que está originando esto, las banshees ya no existen o al menos eso se creía hasta hoy. Los tipejos que la atacaron en el hospital buscaban su ADN. No había tenido el placer de agradecértelo hasta hoy, pero gracias Jungkook.
Asentí con la cabeza y sonreí en forma de aceptación.
— Te hice creer en aquel entonces que buscaban su ADN porque sería una mujer lobo, pero ambos nos equivocamos. Al parecer ella es inmune a la mordida, más sin embargo, fue vinculada con la muerte y hace parte de su trabajo aquí en la tierra.
— No sé ustedes pero no estoy entendiendo ni puta madre.
—Joven Min, este es solo el inicio. — Rió Namjoon.
— A todo esto, ¿cómo llegaste aquí? — preguntó Jin.
— El grito de las Banshees solo es audible para los hombres lobo, al igual que también es irritante he ahí el por qué tus tímpanos sangraron, Jimin. El grito de Hae lo escuché desde la cabaña, supe que era ella al instante. —Tragó saliva. — La edad de dieciocho años era la edad límite para que pudiera transformarse, si no, moriría ya que el pacto con la muerte no fue cumplido.
— ¡Menuda mierda! ¡Iba a morir! — Gritó Tae en exasperación
— Mas no lo hizo. — Namjoon se sentó en la orilla de la cama junto a ella, comenzó a acariciar su larga cabellera rojiza— Es fuerte, siempre ha sido fuerte.
Y eso era verdad. Noté cómo el alfa depositó un corto beso en su frente.
— Y, ¿ya estás listo para contárselo todo? — Hablé yo.
— Por eso he venido aquí, está en todo su derecho a saberlo.
— ¿Saber qué?
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The girl who cried wolf➳ Jungkook; BTS
FanfictionKim Dae Hei, una joven muy práctica e independiente, conoce a un chico, Jeon Jung Kook, cuyos ojos amarillentos despiertan en ella ecos de una familiaridad no exenta de inquietud. Tras el verano llega el invierno y con él, cambios que no siempre son...