thirteen

2.3K 226 20
                                    

4:30 pm

Miré nuevamente mi celular.

Era claro que estaba en el lugar correcto, sin pensármelo dos veces entré al dichoso bar en donde un número desconocido me había citado.

Al abrir la puerta pude sentir la tensión en todo el local, estaba algo oscuro y había una que otra gente tomando soju o fumando. Extrañado, caminé de forma sigilosa estando al pendiente de cualquiera que quisiera atacarme.

— Veo que aceptaste mi invitación, bombón. — Rodeé los ojos al escuchar el ronroneo de aquella voz a mis espaldas.

Me giré rápidamente encontrándome de cara a cara.

—Ha-neul. — La saludé

Seguía igual que como la recordaba, con aquel cuerpazo que la caracterizaba, su cabello castaño hasta la cintura y sus perfectas facciones de muñeca de porcelana.

¡Necesito la mordida Jungkook!

— ¿Qué hago aquí, Ha-neul?

— ¿No es obvio? Te extraño, Kookie. — No me gustaba que ella me dijera así, lo detestaba. — Yo...no puedo sin ti. — Me miró con un puchero entre su rostro, me reí burlonamente.

— ¿Así como necesitabas la mordida, Ha-neul?

La castaña giró los ojos ignorando totalmente mi pregunta.

— Te quiero de vuelta, bombón.

— Mira, Ha-neul, así están las cosas. —Aclaré mi garganta permitiendo que mi voz sonara más clara para ella. — Tengo pareja y no pienso dejarla por alguien tan repugnante como tú.

No tenía pareja, pero prefería respetar lo que sea que tuviese con Dae, además de que no quería regresar con una persona como la que era Ha-neul. La castaña me observó incrédula y de un momento para otro su rostro comenzó a cambiar; su piel comenzó a tomar el color violeta que la caracterizaba y las manchas de color oscurecido no tardaron en salir, al igual que sus cuatro fuertes y agudos colmillos. Sus ojos verde fluorescente comenzaron a alumbrar el local. La gente que se encontraba ahí no tardó en salir del bar bastante asustados.

Con una gran fuerza me tomó por el cuello y me aventó hacia la pared más cercana haciendo que me golpeara de manera brusca en la cabeza, caí de sentón al suelo.

Tenía la teoría de que para convertirse en un hombre jaguar tienes que tener una mordida de hombre lobo, y con el tiempo de transición, la criatura aparecía con la verdadera naturaleza del individuo. Ha-neul es una persona mala y he ahí el por qué tomó la forma de la mujer jaguar.

— ¡Dijiste que me amarías siempre, Jungkookie! — Deslizaba su gran garra por mi rostro, el cuál con los segundos comenzó a gotear sangre.

—Sí bueno, me equivoqué sabes, las personas cambian y este es mi nuevo yo. — Comenté burlonamente, lo cual no le agrado y terminó azotándome en el suelo.

Comencé a toser escupiendo sangre, sangre que quizás provenía de algún órgano interno. La ventaja de ser hombre lobo era que cualquier herida sanaba de forma impresionante. Me levanté del suelo cuidadosamente tratando de no caer por lo mareado que estaba.

— ¿Te han dicho que apestas mintiendo? — Reí.

— Oh, no mentía Jungkook. Te extraño pero no en el sentido amoroso, teníamos buen sexo. —No podía argumentar con ello. — Necesito algo que tu alfa tiene y nosotros no.

Los dichosos bersekers no tardaron en aparecer a los lados de la castaña. —mierda, pensé. —los bersekers eran conocidos por ser guerreros germánicos que vestían pieles de osos para canalizar su ferocidad. La miré esperando a que terminara su oración.

The girl who cried wolf➳ Jungkook; BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora