Mis padres abrieron la respectiva puerta de su habitación encontrándose con un inconsciente Jeon arriba de su cama. Hace unos minutos nos habíamos tomado la tarea de llevar a Jungkook hacia la pieza de ellos, ya que era la habitación más cercana.
— Ya era hora. —Hablé.
—Muévete. — me asustó el hecho de que mi padre me haya hablado así, pero no le tomé importancia.
— Quiero que se vayan todos de la habitación. — Nadie le hizo caso a mi madre. — ¡Ahora!
"Qué humor" escuché un susurro de parte de Hoseok. Empecé a caminar hacia afuera junto a mi manada.
—Menos ustedes, Namjoon y Hei. — Mi hermano y yo paramos en seco. La puerta se cerró quedando solamente los cinco.
— ¿Por qué nos necesitan? —Namjoon rompió el silencio.
Mi padre sacó un portafolio que se encontraba hasta el fondo de la cama, colocó la clave para poder abrir este y sin más sacó una jeringa. Preparó esta misma añadiéndole un líquido azul; acónito, en un abrir y cerrar de ojos la inyección fue colocada justo en la vena yugular de Jungkook, el menor soltó más sangre negra de su cuerpo.
— ¡Qué le estás haciendo! — Estaba decidida a lanzármele a mi padre, más sin embargo Namjoon me sostuvo.
Mi madre saco del buró un pequeño estuche, al abrir este me percaté de que eran pinzas de disección. Se las entregó a mi padre.
—Namjoon, a la nuca.
— ¿qué? — preguntó atónito.
Mi madre sacó dos sillas del closet y las colocó justo enfrente del cuerpo ahora inconsciente de Jungkook
—Tú y tu hermana entraran a la mente de Jungkook.
Namjoon y yo intercambiamos miradas entre preocupación y desesperación, podía darme cuenta de que mi hermano jamás había hecho algo así.
— ¿pero y si algo sale mal? — hablé.
— Tu madre y yo estaremos aquí en todo momento dispuestos a despertarlos del trance. Si su amigo sobrevive a la extracción de la bala se darán cuenta de ello dentro de su mente y si no... Me temo que también se darán cuenta sobre ello.
Un escalofrió recorrió mi cuerpo, estaba aterrada y no estaba segura de lo que estaba sucediendo. Namjoon y yo éramos los peores candidatos para esta "misión". Mis padres intercambiaron miradas y nos hicieron una señal para que Namjoon y yo nos depositáramos en las mismas sillas que colocó mi madre. Ambos nos colocamos en estas frente al cuerpo de Jungkook, me dolía verlo así.
— Las garras, Namjoon. — Habló mi padre orientando a su hijo.
El Alfa dejó salir ambas garras de ambas manos con cierta inseguridad en su rostro.
— Ahora, insértalas en la nuca de Hei y del chico, al mismo tiempo.
Namjoon me miró.
— Estaré bien. — Eso creo, pensé. Le dediqué mi mejor sonrisa, todo con tal de tranquilizarlo.
Antes de encajar sus garras en nuestras nucas, soltó un gran y profundo suspiro, cerró los ojos e hizo lo que mi padre le había pedido. Solté uno de mis gritos sobrenaturales, todo se convirtió en negro.
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The girl who cried wolf➳ Jungkook; BTS
FanfictionKim Dae Hei, una joven muy práctica e independiente, conoce a un chico, Jeon Jung Kook, cuyos ojos amarillentos despiertan en ella ecos de una familiaridad no exenta de inquietud. Tras el verano llega el invierno y con él, cambios que no siempre son...