No podría enamorarme de ti

Capítulo 23

Ji Yong cerró lentamente los ojos al sentir como la sangre perdida lo debilitaba, quedo inconsciente bajo el chorro de agua.

Seung Hyun pateaba con todas sus fuerzas la puerta –Maldita sea abre jodida cosa –al escuchar los forcejeos varios de sus escoltas se acercaron para ayudarle, después de unos cuantos golpes la puerta de caoba fue derribada y aquella silla que le detenía quedo destruida sobre el suelo.

– ¡Ji Yong! –grito el mayor ingresando como loco en la habitación, la pistola estaba sobre una mesita.

– ¡El baño, se escucha la regadera! –dijo Young Bae algo alterado.

–Maldición –Seung Hyun no tardo ni cinco minutos en entrar a la regadera, su pecho se comprimió al ver un pequeño charco de sangre sobre la blanca cerámica del piso, ropa amontonada con manchas rojas, abrió con rudeza la puerta de la regadera y casi se vuelve loco al ver el cuerpo inconsciente y pálido de su esposo bajo un débil chorro de agua y con sangre que se perdía en el desagüe.

– ¡YOUNG BAE LLAMA A UN MEDICO! –el moreno desapareció del baño tomando su teléfono.

–No, tú no puedes hacerme esto, tú no puedes irte –lloraba Seung Hyun tomando el cuerpo inerte de su amor y cargándolo –Ji Yong, Ji Yong ¡Te lo prohíbo! ¡Tú no te puedes morir! –lloro desconsolado sacando el cuerpecito de su amor para dejarlo sobre la cama matrimonial –LARGUENSE DE AQUÍ –ordeno con ira al ver que su personal seguía ahí, los hombres hicieron una reverencia saliendo de la habitación.

–El doctor Cho ya viene en camino –dijo Bae tomando unas gasas que se encontraban ahí para ayudarle a Seung Hyun a detener la hemorragia, el mayor besaba los labios pálidos y resecos del menor llorando en silencio.

–Él no se puede morir Bae –se giró hacia el moreno que negó.

–Cálmate, él no se va a morir te lo aseguro es un mocoso fuerte, después de todo es tu esposo y eso lo hace una persona difícil como tú –el menor tomo una muda de ropa colocándosela al chico, en otra ocasión Seung Hyun lo hubiese corrido, era tan celoso en sus pertenencias y aún más si su pertenencia se encontraba como Dios lo trajo al mundo.

–Señor el doctor ya está aquí –habían pasado unos minutos apenas y uno de los escoltas ya se encontraba hablando desde afuera de la habitación. Con uno de los más poderosos jefes de la mafia no se jugaba por lo que todo personal que lo atendiese debía ser puntual.

–Señor Choi –el viejo hombre hizo una reverencia – ¿me podría dejar revisarlo? –pregunto el medico pidiéndole espacio.

–Tiene una hemorragia –aviso Bae, el hombre asintió.

–Déjennos solos por favor –el moreno asintió sacando a rastras al mayor quien se negaba a dejar la habitación.

...

SE7EN junto con Dae Sung se encontraban en un vuelo con dirección a Seúl, los planes se habían arruinado por lo que habían aplazado los planes para ir a América, sin Ji Yong ya no tenían sentido muchas cosas.

–Oye Dae ¿y esa sangre? –pregunto el mayor al ver la camisa manchada del chico.

–Huh, no sé, me salpicaron supongo –se encogió de hombros mirando hacia la ventanilla. Unos segundos pasaron para que el pelirrojo reaccionara.

–El único que te abrazo fue Ji Yong... vi que se sostenía mucho un costado –el castaño se llevó las manos a la boca para evitar que un grito se le escapara –está herido, siempre lo estuvo y nadie se percató ¡Tenemos que volver a Singapur! –

...

El medico salió minutos después –este chico necesita ir a un hospital, ya le retire la bala, por suerte no toco ningún órgano vital pero ha perdido mucha sangre, si quiere que siga viviendo necesita con urgencia un donador –Seung Hyun empujo al hombre para entrar a la habitación, con rapidez se acercó a la cama en donde el rubio se encontraba inconsciente.

– ¡Necesitamos un hospital, consigue uno en esta jodida ciudad, manda seguridad total, lo quiero blindado en 20 minutos! –decreto Choi Seung Hyun, Bae asintió comenzando con los preparativos.

–Nos acaban de avisar del hospital general que no hay unidades con el tipo de sangre de Ji Yong –comento el moreno después de entrar a la habitación.

–PUES NO SE DE DONDE DEMONIOS LA VAN A CONSEGUIR, BAE SI MI JI SE MUERE ESE HOSPITAL Y TODOS LOS DE ESTA MALDITA CIUDAD EXPLOTAN EN MILES DE PEDAZOS –Seung Hyun seguía tomando la mano del rubio, su palidez era tan aterradora a pesar de que ya le habían detenido la hemorragia.

–La ambulancia ha llegado mi señor, esta abajo –Hye Kook informo para salir de inmediato de la habitación. El mayor cargo el precioso cuerpo de su amor cuidando no lastimarlo en el proceso.

–Estoy haciendo las diligencias necesarias para buscar en otros hospitales, pero al parecer esa sangre es difícil de conseguir y tanto tu como yo somos tipo B –Seung Hyun asintió abrazando a su pequeño, besando sus pálidos labios y apretándolo suavemente contra su cuerpo.

–Creo que el mundo no quiere que estemos juntos mi vida –susurro sobre los labios de Ji Yong.

La ambulancia ya los estaba esperando afuera, los paramédicos visiblemente asustados bajaron una camilla donde el mayor deposito el cuerpo del chico.

La torreta sonó y aquella ambulancia desapareció entre las calles.

–No hay mucha esperanza... él está muriendo –dijo el paramédico asustado al ver que Seung Hyun sacaba su arma y le apuntaba, su mirada de odio detonaba todo.

–Cállate imbécil o te vuelo los sesos –el chico asintió aterrado revisando los signos vitales del rubio.

–NO ME IMPORTA, CONSIGAN ESA SANGRE –grito Bae al borde de la histeria –VAN A MORIR SI NO LO HACEN, NO SABEN CON QUIEN SE ESTAN METIENDO –colgó dejando salir un suspiro totalmente irritado, negó varias veces, si Ji Yong moría Dios sabía lo que Seung Hyun iba a hacer –¿No hay nadie que tenga ese tipo de sangre? –pregunto consternado.

–Mi señor –Go Jin lo interrumpió –siento mi insolencia al inmiscuirme en asuntos que no me conciernen –el moreno asintió dejando continuar –pero hay una persona que tiene el tipo de sangre de nuestro jefe Ji Yong-ssi –SOL casi salta del asiento.

– ¡¿Quien?! ¡Habla Go Jin! –

–V.I.C.T.O.R.Y –