La coincidencia.

Capítulo 8.

Dedicado a Carla Rico Lopez.

*4 meses después...*

(Narra Marcos)

Fui un jodido gilipollas al decirle a Nell que no me gustaba. No sabía que el capullo de Ángel estaba allí con ella, ¡le dejé el puto camino libre JODER! ¿Y si ya la ha besado?
Pero... ¿porqué me molesta tanto esto? No debería haber aceptado ese trabajo. Con lo bien que estaba yo utilizándolas entre litronas y porros. Tuve que aceptar el trabajito de los cojones y... ¿enamorarme? ¿estoy enamorado? ... - Me levanté y me dirigí al baño, lleno de frustración y dudas eché algo de agua fría en mi rostro intentando así despejar mis pensamientos. - Nada. Que no me despejo.- Me dirigí al salón, me senté en el sofá y abrí mi grinder. Coloqué dentro dos cogollos de maria, mi buena y verde amiga, y lo piqué. A continuación cogí un cigarro y lo partí por debajo del filtro, pasé mi lengua por el pega y sobre la palma de mi mano fui vertiendo todo el tabaco. Acto seguido abrí el grinder y expandí sobre el tabaco la maria. Puse el papel de liar encima de esta mezcla, y le di la vuelta, tal que, todo había acabado encima del papel. Lo coloqué para que estuviese bien esparcido, puse el filtro en el extremo derecho de él, y fui rulando el papel hasta que me quedó un perfecto cilindro. De nuevo pase mi lengua por el "pega" humedeciéndolo y pegándolo. Me dispuse a morder el algodón del filtro y sacarlo. Hice una M de cartón y la puse donde antes estaba el algodón. Pasé mi mechero por el lado derecho de mi perfecto porro para que se uniese aún mejor, y por fin, empecé a fumarmelo. Sentí como la calma sucumbía a mi llamada y se apoderaba de mi ser cada vez que expulsaba ese humo blanco con sabor a hierba.