La coincidencia.

Amanecer "sin ti". (C-13)

Comencé a estirarme mientras bostezaba intentando así alejar el sueño. Vi el lado de mi cama vacío y recordé a Marcos, se había ido. Me levanté y empecé a bajar las escaleras con un sujetador y unas bragas de encaje, hacía muchísimo calor.

- Buenos días mamá.- Dije a mi madre que supuse que estaba en el salón por el ruido de la televisión. No obtuve respuesta.

Mientras esparcía la mantequilla por la tostada unos brazos fuertes me envolvieron la cintura y una cabeza entró en el hueco de mi cuello besándolo.

- Buenos días hijita. - Dijo una voz masculina y ronca.

Oh dios, Marcos.

- pero tú... ¿¡No te irías temprano¡?- Dije mientras me daba la vuelta y lo vi vestido exactamente igual que ayer. No pude evitar sonrojarme al ver el bulto que había ahí y enseguida mi mirada volvió a su rostro.

- Sí, pero vi que el coche de tu madre no estaba así que...

- Así qué, ¿qué? Vete anda, tiene que estar al llegar.- Se dio la vuelta, cogió algo de la mesa y me lo mostró:

"He tenido una urgencia en el trabajo hija, hoy no creo que llegue a cenar, lo siento. Te quiere: Mamá."

- Tenemos todo el día para nosotros solos.- Me pegó a él sonriente. El color de mis mejillas aumentó cuando sentí su "cosa" pegando con mi "cosa". Y me acordé de que aún estaba en ropa interior. Al alejarlo de mi empujándolo con la palma de mis manos noté sus fuertes abdominales y logré fijarme bien en él apreciando varios tatuajes. La mayoría eran símbolos, algunos que otros frases, pero la mayoría símbolos o dibujos. Casi todos estaban en su brazo izquierdo de mitad hacia arriba pasando por su hombro y rozando su cuello, eso es lo que vi el día que lo conocí.