La coincidencia.

Necesito de ti.

(Narra Marcos.)

No sé por qué pero sentía esa necesidad de estar con ella.
Pensé que mis sentimientos habían muerto, pero fue verla y algo en mi revivió. Joder que cursi me estoy volviendo.
¿Por qué se hace la dura conmigo?
Si ella sabe que me quiere, y yo se que la quiero, ¿por qué lo hace todo tan difícil?
No podía dormir.
Llevaba seis meses sin saber nada de ella, sin verla, y joder, juraría que está más guapa, que cuerpazo, ¿habrá estado yendo al gimnasio?
"Pero a ver... ¿Qué más te da? Estás con Paula, ni siquiera deberías estar ahí. Levántate y vete." - ordenó mi subcociente. En ese momento la miré, y no sé cómo, pensaba que dormía, pero ella levantó la vista y nuestros ojos chocaron, provocando un hormigueo que me recorría de pies a cabeza.

- Te eché de menos.- Dijo sin separar nuestras miradas.

- No podemos estar lejos el uno de el otro. - Dije.

- Ya, pero esto no es lo correcto, lo sabes. - Sentenció.

(...)

(Narra Nell.)

[12:45]

"Que sueño." - Pensé mientras me desperezaba. Sintiendo cada músculo estirándose y el frío de las sábanas rozando la piel desnuda de mis brazos.
Una vez más, como cada vez que dormía con él, cuando me despertaba desaparecía.
Me levanté de la cama y fui directa a la cocina.
Y como cada mañana después de dormir con él, ahí estaba. Haciéndose el desayuno, solo con unos calzoncillos blancos puestos y luciendo cada músculo de su trabajada espalda, y ese trasero tan bonito. Cuándo se dio la vuelta pude ver cada cuadradito en su abdomen, y las lineas que formaban una estupenda "V", mentiría si dijese que no quedé embobada recorriendo cada rincón de él.