Goku vive una vida aburrida luego de haber ganado el Torneo Del Poder. Caulifla se siente frustrada por no poder progresar como en el torneo y quiere nuevos retos, volver a sentir esa "pasión" que sentía al pelear con aquel "viejo" del U7. Un día a...
Ya era medianoche, y Caulifla seguía estirando a Goku del brazo, que sin remedio éste seguía volando sin poder replicar. Hasta que ella decide aterrizar junto a él en la cima del edificio más alto de la ciudad. Una vez sentados, la situación se estaba poniendo un poco incomoda debido a que la Saiyajin fémina se quedó en silencio y sin pronunciar ninguna palabra desde que llegaron, hasta que el saiyajin mayor decide romper el silencio preguntándole:
— Oye Caulifla... ¿Para qué vinimos a este lugar...?
— ¿No puedes estar ni un solo segundo en silencio no es así? Bien... te diré porque te traje aquí, y es que... — Hizo una pausa ante la mirada atenta de él, que esperaba que continuara y ella así lo hace.
— ¿Recuerdas ese día en el templo cuando me dijiste si no había dicho algo...? Pues sí, dije algo... y era muy importante.
— ¿Así? ¿Y qué era? — Preguntó el Saiyajin sin entender muy bien a que quería llegar con contarle eso.
— Dije que... dije... que... — Decía entrecortadamente costándole un montón soltarlo de una maldita vez — ¡Ay no puedo...!
— ¿Qué no puedes? La verdad no entiendo muy bien lo que quieres decir pero ya es tarde y...
— ¡¡¡DIJE QUE ME GUSTABAS!!! — Lo soltó finalmente, después de guardárselo durante todo un año, sintiéndose aliviada pero a la vez tonta...
Pero al ver que él seguía con la misma expresión de siempre, miró al suelo desanimada y solo se dedica a tomar el último trago que quedaba de la ginebra.
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Goku por su parte seguía procesando lo que le había dicho su amiga, para finalmente comprender lo que le había dicho y exclama sorprendido: — ¡¿que QUÉ?!
— ¿Ves? Ahí estas... ¡idiota como siempre! Eres tan tonto que me ignoraste y te fuiste a la cocina dejándome hablando sola ¡¡COMO UNA TONTA!! — Le reclama lo último a los gritos.
— Caulifla yo... — Iba a decir pero es interrumpido.
— ¡¡No, tú nada!! Si no vas a corresponder mi amor ¡entonces no me digas nada...! — Dijo la última frase con la voz quebradiza.
— Dame eso, te está afectando — dice intentando quitarle la bebida, pero ella se aferra a la botella lo aparta diciendo enojada:
— ¡¡No estoy ebria son Goku!! ¡Todo lo que te digo es cierto...! ¿acaso dudas de mis sentimientos...?
— No, no es eso... pero... — Trataba de explicarse, pero nuevamente es interrumpido.
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