En Mi Oscuro Lugar- Parte 1//Camuflaje Entre Sombras

Capítulo 1// Normalidad modificada

Dato: Los gatos (##), serán utilizados para hacer acto de los pensamientos de la protagonista. :)

Estoy en la escuela, sentada y a punto de terminar mi ensayo; decidí que sería acerca de la economía mundial, fue algo difícil, pero al fin después de 45 minutos lo terminé, claramente no es el mejor trabajo que pude hacer, pero para el poco tiempo que nos dieron no esta nada mal.
Me levanto de mi silla y voy directo al escritorio del profesor, cuando le entrego mi largo apunte, me mira y sonríe ampliamente.
—Veamos que me traes ahora, ¿cuál fue el tema que decidiste?-— voltea a ver el ensayo y empieza a leerlo—. Hum, economía mundial.— murmura y sigue leyendo.

Estoy segura de que es un buen trabajo, sin faltas ortográficas o gramaticales, sin embargo, si él quiere corroborarlo por mí está bien, un poco de suspenso no me molesta.

—Bien, realmente es muy bueno, me agrada que no te encerrarás solo en la política, viste en otras perspectivas y están bien fundamentadas coherentemente.— ya lo sé, pero no es necesario decírselo.

—Gracias profesor.— contesto amablemente mientras él califica mi trabajo con la nota máxima.

Tomo mi cuaderno y espero a que registre mi nota en la boleta.
Estoy apunto de regresar a mi asiento cuando un sonido me hace detener, sonido de lo que parecen ser...¿disparos? Como si de un resorte se tratará las miradas de todos se vuelcan a ver la parte trasera del aula, donde un gran vidrio hace la función de pared junto con la puerta del mismo material.

Sigo parada justo a lado del escritorio del maestro, quien se pone de pie y escucha atentamente el disturbio que se a creado fuera.

Nosotros estamos en la última aula, la más grande del instituto y se encuentra después de un largo pasillo, nuestra visión fuera de aquí es nula, porque aunque la pared es de vidrio, el aula queda frente la pared del pasillo.
Los disparos se oyen cada vez más cerca y no solo eso puedes escuchar, lo que nos alerta aún más son los gritos, llantos y vidrios romperse.

El maestro no pierde tiempo y nos pide que mantengamos la calma, callados y en nuestros asientos. Obedezco su indicación y regreso a mi asiento, guardo todas mis cosas en mi querida mochila y la aprieto contra mi pecho.

El profesor camina hacia la puerta para asomar la cabeza por el pasillo, mientras mis compañeros y yo aguardamos asustados, varios de ellos comienzan a perder la calma y lloran en silencio por el pánico. El maestro de repente cierra la puerta y nos ve con los ojos muy abiertos, es más que obvio que vió algo que lo asustó lo suficiente como para reaccionar de esa forma: le tiemblan las manos y su piel oscura tiene un color pálido.
En ese momento comienzo a asustarme de verdad, mi corazón late rápido en mi pecho y las palmas me sudan.

—¿Qué sucede maestro?, ¿qué pasa afuera?—pregunta uno de mis compañeros atreviéndose a preguntar lo que nadie quiere saber.

El maestro traga saliva y se relame los labios:
—No...no lo sé, la verdad es que no sé qué es lo que pasa. Hay hombres armados, llevan a todos a algún lado. Será mejor que no hagamos ruido y nos mantengamos en silencio, debemos llamar a la poli...— sin poder terminar la frase el maestro cae al suelo, porque un tipo encapuchado y con un arma grande dispara desde fuera del salón, rompiendo el cristal y matando al profesor en el acto.

Fue solo un instante, solo un momento y sin pensarlo dos veces todos dentro del aula intentan con desespero huir: corren por allá y por acá, gritan y tratan de esconderse, sin ningún resultado en realidad.
Entre tanto alboroto intento pensar con claridad para poder hayar una salida, no obstante, el único lugar por donde se puede salir del aula es justamente donde esté asesino está. Llegan más hombres encapuchados y armados solo para dispararnos. Algún tipo de instinto llega a mi de golpe y me hace arrojarme al suelo, estando ahí me arrastro lo más rápido posible detrás del escritorio del profesor, que entre tanto desastre ocasionado lo volcaron, talvez en un intento frustrado por cubrirse. Por ahora agradezco que lo hayan hecho, así ellos no podrán verme.