Scandal in the office *TERMINADA*

Capítulo 32

  ______ se miró en el espejo de cuerpo entero, en la zona de probadores de la tienda nupcial. El vestido de color marfil que se había probado tenía tanta caída como una combinación de seda hasta los pies.
Estaba sobre una plataforma y giró la cabeza para verse por detrás en el tríptico de espejos.
El vestido, casi sin espalda, mostraba su piel desde el cuello hasta la cintura.

Sólo faltaban dos semanas para la boda y, dado el poco preaviso, un vestido a medida no había sido una opción.

-Estás preciosa, ______ -dijo Hanna, detrás de ella.
-Gracias.
- Siwon se caerá de espaldas al verte.
-Y no será debido a uno de los temblores sísmicos de San Francisco -bromeó ella.
-Tú eres más que capaz de crear tu terremoto particular -Hanna soltó una risita tintineante.

______ pensó que había sentido el mundo moverse bajo sus pies. Pero no había tenido nada que ver con cuestiones sísmicas. Su mundo se había tambaleado estando en la cama con Siwon.
La idea de volver a ella le provocaba escalofríos de placer.

-Ese vestido te queda de maravilla, cariño -dijo su madre, desde el sillón que ocupaba en un rincón.
-Gracias, mamá.
-Mi nena va a casarse -su madre sonrió, con lágrimas en los ojos.
-Oh, mamá.

Su madre le quitó importancia al asunto agitando la mano.

-Tu padre está contento.

« ¿Contento? Más bien deberías decir en éxtasis», pensó ______.

Cuando, hacía unos días, Siwon y ella les habían comunicado a sus padres que iban a casarse, el rostro de su padre se había convertido en una sonrisa casi eterna.
Su reacción no se había parecido en nada a la que tuvo cuando le comunicó su plan de casarse con Donghae. Además, su padre había actuado como si la conveniencia de su boda con Donghae fuera un detalle insignificante.

-Si no conociera a Donghae desde hace tanto tiempo -dijo su madre en ese momento-, me habría preocupado tu decisión de casarte de forma tan apresurada.

______ reflexionó que al menos uno de sus progenitores pensaba con sensatez respecto a su boda con Siwon.
Pero sabía que debía tranquilizar a su madre. Ya que se había decidido a casarse con Siwon, pensaba llegar hasta al final, y no quería que su madre se preocupara ni un segundo.

-En cierto modo, no es algo apresurado -contestó con ligereza-. Conozco a Siwon desde hace tanto tiempo como papá y tú.

Se guardó el resto de sus pensamientos y se dio la vuelta para volver a mirarse en el espejo.
¿Quién era esa mujer que había accedido a caminar hasta el altar dentro de dos semanas? ¿Qué había hecho?

Su vida había sido un caos desde que había accedido a casarse con Siwon la semana anterior. La dominaban el nerviosismo y la excitación, y ambas cosas alternaban con momentos de puro pánico.
Siwon la abrumaba. Desde que habían dormido juntos después de la fiesta en su mansión de Pacific Heights, se había sentido distinta. Era indudable que se comportaba de forma poco habitual, como demostraba el hecho de que hubiera aceptado su propuesta.

Y aunque lo habría adivinado, Siwon había demostrado ser el compañero de cama más excitante e inventivo que había tenido nunca.
Al pensar en que se extendían ante ella montones de noches como ésa, su cuerpo se estremecía de placer.

-¿Sabes una cosa? -comentó Hanna-. Siempre he pensado que Siwon se sentía atraído por tu ácida inteligencia.
-Gracias -repuso ______ con sequedad-. Espero que tengas razón, porque va a recibir dosis ingentes en el futuro.
-Estás pensando en hacerle trabajar en el dormitorio, ¿eh? -Hanna le guiñó un ojo.