Más tarde, esa misma noche, mientras contemplaba a Justin dormir, con el rostro relajado y el pecho subiendo y bajando acompasado, había comprendido que sus sentimientos por él empezaban a complicarse.
Él había bromeado sobre el hecho de no ser más que un donante de esperma, pero la realidad era que empezaba a meterse bajo su piel.
Inquieta y desvelada, había abandonado la cama.Su intención había sido ir a la cocina a por un vaso de leche pero, en cambio, se descubrió haciendo una pausa ante la puerta del despacho de Siwon.
Sin saber bien qué pretendía hacer, había entrado y encendido el ordenador. Tras navegar por Internet unos minutos, había abierto uno de los cajones del escritorio.Había visto, de inmediato, el DVD que ya había visto unos días antes, cuando buscaba una libreta para tomar notas durante una conversación telefónica con un cliente potencial. El DVD estaba etiquetado con el nombre de Donghae y habría sido imposible no verlo.
Esa segunda vez, no titubeó. En mitad de la noche, había introducido el DVD en el ordenador y lo había visto hasta el final.
Y no había sentido absolutamente nada.
Volvió a la realidad y miró la pared blanca de la sala. Siwon era su presente.
Su amante. Su marido. El hombre al que amaba.Era difícil pensar en estar casada con él mientras lo amaba con desesperación y él no la consideraba más que una conveniencia. Pero era mucho peor pensar en hacerlo mientras intentaba vanamente, año tras año, quedarse embarazada.
Embargada por una increíble y creciente desazón, comprendió que tendría que contarle a Siwon el diagnóstico de la ginecóloga y ofrecerle una salida.
Aunque eso le costara perder su corazón.
Cuando llegó a casa, una hora después, Siwon la recibió al entrar.-Has vuelto pronto -comentó ella.
Había esperado tener más tiempo para prepararse respecto a lo que tenía que decir, pero en realidad eso sólo habría prolongado su agonía.
-Me alegro de que estés de vuelta - Siwon le dio un rápido beso en los labios. Sus ojos chispearon-. He tenido una iluminación en el trabajo.
Hizo una pausa, como si esperase que ella adivinara de qué se trataba. Como ______ se limitó a mirarlo, sin decir palabra, sonrió.
-Danza del vientre -dijo.
Ella lo miró interrogante y la sonrisa de él se amplió de oreja a oreja.
-Se me ha ocurrido que podrías dar un nuevo giro a tu aptitud como bailarina. Sabiendo lo que hace el ballet por nuestra vida sexual, imagina qué efecto tendría la danza del vientre.
Ella le lanzó una mirada aviesa y él adoptó una expresión solemne.
-Simplemente por el objetivo de dejarte embarazada, claro -apuntó.
-Claro -repitió ella.Sabía que él bromeaba, pero que le recordara el propósito que los había llevado al matrimonio hizo que se le encogiera el corazón.
-Ven a la cocina y te serviré algo de beber - Siwon le guiñó un ojo—. Algo sin alcohol, por si acaso ya hemos iniciado ese bebé.
El corazón de ella se encogió de nuevo.
-Cuéntame cómo te ha ido el día -dijo él, poniendo rumbo hacia la cocina-, ¿Qué tal tu visita al médico?
-Noticias inesperadas, la verdad -hizo acopio de coraje-. Ha surgido otro obstáculo en mi carrera para quedarme embarazada.Siwon se dio la vuelta y se quedó inmóvil.
-¿Qué quieres decir?
-Quiero decir que me han diagnosticado fibromas uterinos -inspiró profundamente-. Muchas mujeres los tienen, pero en mi caso es posible que sea necesaria una operación, sobre todo si quiero seguir aterrándome a mi fertilidad.Al ver que Siwon fruncía el ceño, se mordió el labio inferior.
-Es imposible saber cómo de difícil me resultará quedarme embarazada tras una intervención -dijo-.
Y como ambos sabemos bien, mis posibilidades de embarazo ya eran escasas para empezar.
-Ay, gatita - Siwon soltó un resoplido—, lo siento mucho.
-Debería dar gracias al cielo porque hoy en día existan otras opciones, aparte de una histerectomía -intentó soltar una risita, sin éxito.
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Scandal in the office *TERMINADA*
RomansHabía encontrado a la mujer que quería... y estaba dispuesto a todo por conseguirla. El guapísimo director general de la empresa deseaba a la hija del jefe. Choi Siwon le había hecho el amor a _________ Tremont innumerables veces... pero siempre en...