Una nueva existencia no tan cruel

Primer día de playa/ La llegada de las súcubos

El medio hermano de Ealalis, guió al grupo a sus respectivas cabañas, el hombre había arrendando tres cabañas, una para el y su familia, otra para los chicos y otra para las mujeres.

—Aquí, esta su cabaña—el medio hermano, le dijo a las chicas y agregó con una sonrisa—pueden dejar sus cosas en las habitaciones y prepararse para ir a la playa.
—Muchas gracias, hermanito—Ealalis, le sonrió a su medio hermano y entró a la cabala junto con las demás chicas.

El medio hermano, cerro la puerta al comprobar que no faltaba ninguna mujer del grupo y guió a los chicos a la cabaña.

Malak, observó la cabaña y se sorprendió al darse cuenta que el lugar era como una casa de primer nivel, el primer piso, consistía en una gran cocina, el comedor el cual tenia una mesa redonda de madera, varias sillas a su alrededor, un living con sillones y un sofá grande, un baño, en el segundo piso estaba las habitaciones.

—Vamos a nuestra habitación—Ealalis, le dijo a su hermana menor.
—Claro—le contestó Malak.

Ambas chicas, subieron las escaleras y entraron a una habitación, la cual tenia dos camas, ambas de una plaza y media.

Ealalis puso su bolso en su camas y lo abrió, la morena hizo lo mismo, pero con Thereeyeux, el observo con una sonrisa feliz a su ama.

—tenemos una salida a la playa al frente de nosotros, hay que aprovecharla—Ealalis, le dijo a su hermana y agregó —vamos a ponernos nuestro traje de baño
—¿Es necesario?—preguntó Malak algo nerviosa.
—Claro, ¿como piensas meterte al agua?—le respondió Ealalis y agregó—Ponte tu traje de baño primero, quiero ver como te ha quedado.

Malak, suspiro y obedeciendo a su hermana mayor, se quito su ropas y se puso su traje de baño de encaje.

—Te vez hermosa y sexy—Ealalis, exclamo con emoción y observo con detalle el traje de baño.
—Hee, no me mires así—Malak, se avergonzó y se tapó su cara que estaba sonrojada.
—Jaja, vaya tu cuerpo ha cambiado un poco—Ealalis, sonrió de forma picara, se puso delante de su hermana menor y empezó a jugar con los pechos de Malak—Tus pechos son un poco más grandes y suaves.

Malak, observo como su hermana jugaba con sus senos, mientras la cara de Malak, se ponía mas roja de lo que estaba y gemía de excitación.

—Por favor, para hermana—Malak, cerro sus ojos y se tapó su boca para no emitir un sonido vergonzoso.
—Me da envidia hermanita, tiene un cuerpo de envidia que se va desarrollando —Ealalis, paro de jugar con los pechos de Malak.

Cuando paro, Malak se arrodillo en el suelo ya exhausta de tratar de aguantar sus gemidos.

—Me gusta esas caras que pones cuando te da un orgasmo—Ealais, le dijo a su hermana y agregó —Bueno hay que prepararnos para la playa.
—C-claro—Malak, se levantó apoyándose del respaldo de su cama.

Mientras tanto los chicos, ya tenia sus traje de baño listos, el elfo oscuro Lokhir, vestía con un traje de baño azul oscuro, Agameon, vestía con uno azul claro, mientras que Alfredo, vestía con uno de color naranja.

—La chicas, se demora—comentó Agameon.
—No te pongas tan ansioso—Le contestó Lohkri a su amigo y agregó —Oigan, ¿cuales de las chicas prefieren?
—Por ser elfo me inclino por Ealalis—respondió Lohkri que agregó —Pero me estoy interesando por esa tal Dante, su aura misteriosa me intriga mucho.

Para Agameon, no era sorpresa que su amigo preferiría a esa dos chicas, Ealalis, era hermosa, además de tener la belleza cautivadora de una elfo, Dante, se podía decir que tenia el mismo color de piel de Lohkri, eso también atraía a su amigo.