1 semana después.
En las gradas.
Jesica llega sonriendo y se sienta a un lado mío.
-¿Por qué tan feliz? –le digo.
-Acaba de besarme la persona más especial del mundo. –dice suspirando.
-¿Tu padre? –me mira asqueada y me río.
-No, tarada, Brenan. –la miro confundida.
-¿Quién es Brenan?
-Vemos astronomía juntos y es hermoso. –suspira de nuevo. –Nunca me había sentido así con alguien, ni siquiera con esas bestias. –dice señalando al equipo de fútbol americano que está entrenando y me río.
-¿Estás enamorada?
-Si y puedo jurar que no quiero solo sexo con él. –sonrío.
-Me alegro mucho por ti. –suspira de nuevo y me río.
-Las zorristas están practicando también. –dice mala gana. –Yo fuese tú y cuidaría muy bien a Dylan.
-Confío en él.
-Pero no deberías confiar en ella. –sonrío.
-Tranquila.
Media hora después.
-¿Vas al viaje? –dice Jess y la miro.
-No lo sé, quizás. –digo tranquilamente.
-Tienes que ir, el equipo de bestias siempre va, es una tradición para ellos y ahí es donde las zorristas aprovechan para que se las follen.
-No voy a prohibirle a Dylan que no vaya si yo no voy.
-Eres tan inocente. –dice pasando su mano por mi cabello.
-Oye...-se ríe. –Además solo es un tonto viaje a no se donde...
-Si te digo a donde es, vas a suplicar por ir. –dice sonriendo triunfal.
-No me interesa...
-Nueva York. –la miro.
-¿Es enserio? –asiente y gritamos juntas. –Ahora si me convenciste. –se ríe.
-Ya verás que será divertido. –sonríe. –Una semana sin molestos profesores o padres.
-¿Quién nos supervisará?
-Nadie. –sonríe ampliamente. –Cada año lo hacen.
-Está bien. –digo sonriendo.
-¿¡A dónde crees que vas, Bell!? –miramos en dirección donde están los chicos y Castle está yéndose enojado, miro a Dylan que va tras él.
-Castle ha estado actuando muy extraño estos días. –dice Jess.
-Si, no se por que. –digo mintiendo.
-Quizás deberíamos...-los veo alejarse. –Mierda. –la miro. –Llegaré tarde. –se levanta. –Nos vemos más tarde.
-Corre, tarada. –digo riendo y se va corriendo, me levanto para seguirlos. Llego a donde están, Castle esta enojado y Dylan calmándolo.
-Cálmate, baboso. –o eso creo. Niego.
-¿Qué le pasa? –digo.
-Está estresado porque no ha podido dormir bien. –me susurra Dylan.
-¿Y por que no duermes en casa de Dylan? –le digo y me miran. -No lo pensaron ¿cierto?
-El problema aquí...-dice Castle. –Es que vaya a donde vaya, me van a seguir y sería un riesgo más grande para todos.
-Un riesgo grande eres tú ahora. –dice Dylan. –Además mi padre está allá y es muy difícil que alguien entre a mi habitación tan fácilmente.
-Bien, no se diga más. –dice Castle y nos reímos. –Me iré.
-¿No tienes clases? –digo.
-A la mierda las clases. –se va y nos reímos.
-¿Terminaste de entrenar? –digo y asiente.
-Me iré a duchar y vuelvo, espérame en el campus, rodeada de gente, pero que no se te acerque. –me río.
-Está bien, no tardes. –sonríe y me da un beso.
-No lo haré. –sonrío y entra a las duchas, me dirijo al campus y me siento en unas bancas.
-¿Me puedo sentar? –alzo la cabeza y es Josh que tiene las manos en los bolsillos. Tenía tiempo que no veía a Josh, hasta ahora.
-Claro. –digo y se sienta. –Tenía tiempo que no te veía ¿dónde te habías metido? –se encoge de hombros.
-Castigado.
-¿Por qué?
-Eso no importa ahora, quiero que me digas algo. –asiento. - ¿Dylan aún sigue enojado conmigo?
-Bueno, sinceramente es estúpido que lo preguntes. –me mira tristemente.
-Sé que cometí una estupidez...-niego.
-Eso no fue cometer una estupidez, Josh, eso es haberla cagado a lo grande. –suspira.
-Joder, lo sé. –se apoya en sus brazos. –Ni siquiera sé porque lo hice.
-¿Y te arrepientes ahora? –niega.
-Intenté explicarle, pero es muy temperamental y de verdad quiero que me perdone, es mi mejor amigo. –dice con la voz quebrada.
-Josh...-coloco mi mano en su brazo para consolarlo. –Tendrás que esperar, si tú mismo dices que es temperamental no creo que te deje hablar ahora.
-Lo sé y no quiero que pienses que te estoy pidiendo que me ayudes a que me oiga, solo quería pedirte que no dejes de ser mi amiga. –niego.
-No lo dejaré de ser, tú y Jess me ayudaron al comienzo. –sonrío y él medio sonríe.
-Gracias.
-No agradezcas, ahora, levanta ese ánimo, debes tener clases ahorita ¿no?
-S...
-Creo que alguien no entendió el maldito significado de "aléjate de mi vida y todo lo que esté en ella" –dice Dylan serio.
-Ya me iba. –dice Josh tristemente levantándose.
-Aún te veo aquí. –dice secamente.
-Nos vemos. –dice Josh y se va.
-¿Qué te estaba diciendo?
-Que te extrañaba. –se ríe sarcásticamente y se sienta.
-Por mí que se pudra. –niego.
-En fin. –digo. –Jess me contó lo del viaje. –sonríe. –Y lo de las zorristas, según ella.
-Si, tener a Castle de compañero de habitación no es lindo. –me río. –No me deja dormir y tengo que ir a dormir en otro lado.
-¿Conmigo?
-¿Irás? –dice emocionado.
-Es Nueva York, mi amor, ¿Cómo quieres que no vaya? –se ríe. –A menos que no quieras...
-Claro que quiero que vayas. –sonrío. –Sería perfecto si vas.
-Iré. –sonríe ampliamente iluminando sus ojos.
-Justo lo que quería. –me río feliz.
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El idiota de la motocicleta
Novela Juvenil¿Qué sentirías si dejaras tú vida de forma drástica para terminar en medio de la nada, junto con tú madre y su pareja? Esta es la historia de Brook Foster, una chica que tuvo que mudarse a Texas desde Manhattan, dejando toda su vida atrás. Una nueva...