| 8 |

16.8K 1.6K 429
                                    


No entre a clase tenía muchas cosas en la cabeza, él pudo haberme dicho "hey Ji él es mi amigo Kim Taehyung de la universidad" antes de que lo odiara, pero no lo hizo; toda su secreta y extraña ex-amistad me parecía un misterio o un rompecabezas donde las piezas no parecían encajar en lo absoluto.

Espere a que Jimin estuviera lejos para salir de la universidad, me largo a casa, Jungkook me lleva los miércoles pero eso sería en unas 3 horas y no se que decirle cuando lo tenga en frente.
Mande un texto al rubio diciendo que me iría a casa que le dijera a kook que tome un Uber, una mentira que lo tranquilizaría; últimamente no me dejan andar sola.

Era patética la distancia entre universidad y mi casa, apenas pise la entrada cuando lo noté a mi lado viéndome de reojo.

—¿Estas obsesionado conmigo o algo así? Tengo un gas pimienta y

—Camina ya, no voy a hacerte daño, yo solo...

Paso una mano por su nuca como si le costara trabajo sacar las palabras de su boca y yo tomé fuertemente los tirantes de mi mochila lista para correr si se tornaba más extraño.

Espera un segundo.

—¿Tu me amenazaste por mensaje?— Di un paso hacia atrás dejando escapar aquella duda.

—No, no no no— negó muchas veces con la cabeza y las manos.

Fruncí el ceño en símbolo de desconfianza.

—Solo caminemos a tu tonta casa ¿si?

—Tu estás diciendo que ¿quieres acompañarme a mi casa?

Viéndolo bien, este tipo se hacia el rudo pero tenía cara de que no mataba ni a una mísera hormiga.

—No quiero, solo voy a hacerlo Jung— rodó los ojos y me miro expectante a que caminara.

—¿Y me contarás qué pasó la noche de la fiesta?— pregunté intentando sacar ventaja de la extraña situación.

—Y te contaré lo de la fiesta— contesto rendido.

¿Tanto le importaba acompañarme aquel corto trayecto? Comencé a caminar con Taehyung a mi lado quien miraba la mayor parte del tiempo abajo y atrás.

—¿Por qué me acompañas?— veía nuestras sombras contra el sol en el gris pavimento de la banqueta.

—¿Por qué cuestionas absolutamente todo?— evadió.

—Porque pienso que eres muy raro y ocultas cosas— solté sinceramente mirando su perfil.

Río de lado —Yo pienso que tu eres muy rara también y no me importas una mierda.

Cruce mis brazos —No te importo una mierda y hoy me sigues a todos lados como perrito faldero— dije entre dientes hacia la dirección contraria lo suficientemente alto para que me escuchara.

—Le dije que no se metiera esas mierdas— me miró —solo estábamos tomando pero el quizo experimentar más, irse a lo grande como idiota, combino alcohol con extásis solo para impresionar a una estúpida rubia, tuvimos una discusión donde ambos terminamos con un ojo morado y me largue, después su cuerpo reaccionó mal, quedó inconsciente, pero yo no podía volver por él.

—¿No pudiste volver por tu amigo moribundo?— pregunté con angustia ante lo que acaba de confesar sobre Jungkook, mi amigo al que abandonó a su suerte —¿Que jodida cosa podría ser más importante?

Su semblante era serio y fijo hacia enfrente, parecía estarlo recordando todo de nuevo.

—No es de tu incumbencia. Llegamos.

Mire detrás de él y estábamos en la enterada de mi casa, no noté que habíamos llegado, cruzamos el pequeño jardín de la entrada hasta llegar a mi gran puerta blanca.

—Eres un gran imbécil ¿lo sabes?— dije sin dudas en su rostro— no sé si te acercas para recuperar su amistad o algo así— frunció el ceño —pero no va a funcionar, el ni si quiera quiere hablarme de ti.

—Yo no quería hablar de él tampoco, aprende a escuchar lo que te dicen y lo que sale de tu boca.

Aprende a escuchar.

Ya puedes irte— conteste molesta.

Kim caminaba por la jardinera de enfrente para largarse cuando lo detuve con un sonoro ¡hey!
Volteo enseguida y respondió con el mentón.

—¿Por qué robaste?

—Por la misma razón por la que deje a tu amigo en la fiesta— siguió con su camino.

Aprende a escuchar.

Lo deje ir, era demasiado por hoy, entre a mi casa y me eché en el sillón a revisar mi celular.

Cara de rata:
No me esperaste, ¿todo bien?

Jihae:
Todo bien, solo estaba harta de la escuela y quería dormir.

Cara de rata:
Bien, nos vemos mañana, y cámbiame el nombre de contacto si no quieres morir.

Jihae:
Hasta mañana cara de rata :)

Su desconfianza me hace sentir herida, el no me platicaba cosas y yo... bueno últimamente somos iguales.

—¿Entonces esta blusa blanca con los jeans y los tacones rojos?— pregunte nerviosa.

—Obvio, si usas vestido te verás urgida, así estás perfecta Ji.

—¿No es mucho escote?

—¡No!
—¡Si!

Contestaron mis amigos y mi hermano en unísono.

—Seok Jin es mi amigo, pero si te llega a tocar un solo cabello Jihae.

—Lo matas, lo matas, ya se— conteste cansada de la ya muy repetida frase de mi hermano en la semana —¿Ustedes que harán?

—Videojuegos— contestaron en unísono como zombies adictos a la nueva consola.

Entro Yoongi por la puerta con dos bolsas repletas de cerveza alzándolas en el aire victorioso.

—Bien, no tarda en llegar por mi— tome mi bolsa y mi celular.

—Te quiero aquí a las 12:00pm máximo estaré esperando— paso Yoongi abriendo una cerveza hacia la sala donde estaban los demás.

—Si papá— vire los ojos y el tono de mi celular comenzó a sonar, era Seok Jin, estaba afuera.

—¡Ve por el recuerda ajustarte el escote!— grito Jimin obteniendo las miradas serias de todos y un golpe en la nuca de Jungkook quien se encontraba a su lado.

Di la vuelta y salí de la casa y ahí estaba el chico encantador recargado en su auto, sonrió al verme y emitió un largo wow antes de saludarme.

—Adelante señorita— abrió la puerta del copiloto dejándome pasar, la cerró y movió su mano saludando a mi hermano en la puerta, vergüenza es poco.

———————

Estoy viva 💜

Stay | kthDonde viven las historias. Descúbrelo ahora