CAPÍTULO 4

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Ya estaba amaneciendo y todos comenzaban a despertarse. Yo era la única que aparentemente seguía dormida y al ver que no me despertaba el resto comenzó a preocuparse.

 ¡Mel... Despierta!.- Exclamó Fer.

Al escuchar jaleo, los de la otra habitación se asomaron y vieron que yo no me despertaba. Entonces René dijo...

Bah, seguro que se despierta al medio día.-

¿Y si no se despierta?- Preguntó Laura.

Al decir eso todos se acercaron a mí y me empezaron a zarandear suavemente hasta que...

¡Ay! Dejadme dormir.- Exclamé.

Veis, os dije que estaba durmiendo.

No sé vosotros pero yo tengo hambre.- Dijo Aron.

René se dio la vuelta y bajó las escaleras, los demás la siguieron dejándome sola en la habitación. Pasaron unos minutos y al ver que nadie subía decidí bajar ya que yo también tenía hambre.

Escuché ruido en el comedor y entré, estaban todos sentados en una mesa comiendo. Ángel levantó la mirada sorprendido.

¿Pero qué haces aquí, cómo has bajado?-

Pues por las escaleras, que quieres que muera de hambre.-

No nos habíamos olvidado de ti, ahora te íbamos a subir algo, ¿Estás bien?- Me preguntó levantándose de la silla.

De la pierna sí, pero me muero de hambre.- Dije acercándome a su silla y me senté.

De repente Liam paró de comer y le preguntó a René...

¿Cómo llevas lo de tu hermano?-

Ella intentó responder, pero Fer se le adelantó.

¿Pues cómo crees que lo lleva?, ¡Si no tiene sentimientos, mató sin miramientos a mi abuela y no tuvo remordimientos en hacerlo con el tuyo,- dijo mirando a Kail-, ¡No le importó matar a su hermano cómo tampoco le importaría acabar con cualquiera de nosotros!-

René se levantó y dijo seriamente...

Si no hubiera hecho todas esas cosas muchos de vosotros estaríais muertos. Incluido tú, no sé de qué te quejas, eras tú o tu abuela yo sólo elegí. Pero tampoco quiero hablar de eso. No quiero oír ni un sólo reproche más ni hacia mí, ni hacia nadie, así que haremos lo siguiente. Vamos a salir ahí fuera a por vuestras cosas y si nos encontramos a alguien de vuestras familias seréis vosotros quien acabe con su vida, creo que es lo justo.-

Todos asintieron, se levantaron y recogieron la mesa. Yo no podía ir así que pedí a Laura que cogiera mis cosas. Dani se quedó conmigo.

¿Qué tal llevas la pierna?- Me preguntó.

Pues mejor, aunque me duele un poco pero es soportable.-

Me alegro.-

Por cierto, perdón por estrujarte la mano mientras Ángel me curaba.-

Tranquila, no pasa nada. Lo importante es que tú estés bien.-

En ese momento nos quedamos mirando el uno al otro sin decir nada, él me sonrió, me acerqué un poco a él y le dije...

Gracias.-

Entonces nos miramos me intentó susurrar algo, pero me giré, nuestros labios estaban a centímetros, él me besó tímidamente, no quería que ese momento acabara así que seguí el beso, cerré los ojos y lo disfruté, fue suave y cálido, aparté mis labios de los suyos y abrimos los ojos, se me erizó la piel y un escalofrío recorrió mi espalda, esos ojos verdes eran preciosos. 

* * *

Ya habíamos pasado por todas las casas, fue muy doloroso para todos acabar con sus seres queridos. Estábamos en la plaza dispuestos a regresar al hotel cuando Fer me dijo...

Oye, y si vamos al pueblo de al lado por si todavía hay alguien vivo.-

Vale, ¿Pero no es mejor que venga alguien más?-

No, mejor los dos solos.-

Íbamos a medio camino del pueblo en un silencio incómodo hasta que Fer dijo...

Tengo que contarte algo.-

Dime.-

Bueno antes de nada pedirte perdón por lo de antes, no quería gritarte.-

Tranquilo no hay nada que perdonar. Y bien, ¿Qué es eso que me tenías que decir?-

Pues... Verás, durante este último año he estado quedando con una chica en Barcelona, ya que los dos vivíamos allí, y bueno con el paso del tiempo me he dado cuenta de que siento algo más que una simple amistad por ella.-

Ahm... Pero esa chica quizás ya no esté viva, ¿No crees?-

Sí que lo está, ahora mismo debe de estar en tu casa con el resto.-

¡¿Es Mel?!, ¿Pero no crees que es un poco mayor para tí? No sé a ver ella tiene 24 y tú casi 20.-

Bueno, habló la que está enamorada de uno que va a cumplir 22.-

No, si yo lo digo por decir.-

Pero sé que es imposible y ahora más, se nota que Dani quiere algo y también está Kail, que ella está pillada por él.-

No te cierres puertas tú sólo, Kail tan sólo le atrae físicamente y Dani ayudaba a Ángel, lo vuestro puede ser.-

Pero soy demasiado poco para ella.-

Ja, ja, ja,... Por intentarlo no pasa nada.-

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