-¡Esto es tonto! –Damian exclamó cerrando su computadora de un golpe-. No hay nada.
Se recargó fastidiado en el respaldo de la silla. "Supongo que debo buscar en otro lado." Pensó en cuanto se comenzó a balancear hacia atrás. "En cuanto llegue, asaltaré la computadora de la cueva... Es arriesgado, pero necesito respuestas... Mientras Padre no se entere de lo que estoy buscando, todo estará bien... ¡Ya quiero regresar a mi cuerpo!"
-Jovencito... -Una voz extrajo a Damian de sus cavilaciones-. No suba los pies a la mesa, por favor...
Una de las encargadas de la biblioteca le había llamado la atención, pues sin querer, se había tomado la libertad de sentirse como en casa. Acató inmediatamente la petición de la dama.
-Y por cierto, ya vamos a cerrar... -La mujer aclaró tomando algunos libros de la mesa y llevándoselos, no sin antes lanzar una mueca molesta a la faz de Damian-.
El muchacho agachó la mirada buscando su reloj.
"¡¿Las seis?!" Exclamó en su cabeza. Abandonó la silla de un salto. Recogió el pequeño desorden que construyó en sus horas de investigación y salió corriendo de la Biblioteca Central.
-Supongo que debo presentarme a esa cena extraña... Y mejor si no llego tarde... -Damian se dijo abriendo la puerta del auto-.
Sin embargo, al levantar la vista un par de segundos, visualizó una silueta por demás conocida. Se pensó dos veces su resolución antes de emitir un juicio, y más cuando no lo vio solo.
-Ése es Todd... ¿Y Harper? –Se inquirió cerrando la puerta-. ¿Qué está haciendo aquí? ¿Y con él?
Damian los observó caminar del otro lado de la acera mientras cargaban algunas cajas y bolsas.
-Drake no me dijo nada... Bueno, ¿por qué debería decirme? No son mis asuntos... -El ojiverde se dijo en cuanto suspiró fastidiado-. ¿A mí qué me importa? De todos modos me dijo que no me involucrara...
Estuvo a punto de abrir nuevamente la puerta cuando levantó la vista una vez más...
-Aunque... también le dije que le devolvería el favor... Se lo debo...
No les quitó la mirada de encima. Caminaron un par de metros hasta llegar a un auto estacionado, del cual Roy abrió la cajuela metiendo la carga que llevaban.
-La discusión de ayer y su reprochable acto comenzaron porque le hice creer que habíamos terminado... Aunque no fue mi intención... -Damian se dijo cuando se acercó a la orilla para cruzar la avenida-. Sólo debo decirle que no quiero terminar. Me disculparé y todo volverá a la normalidad. Drake estará feliz y yo habré saldado mi deuda... Sólo eso...
No tardó en tomar una decisión cuando ya estaba cruzando la calle. Sin embargo, casi se ahoga al pasar saliva al mirar a Roy abrazar a Jason. Bastaron esos segundos de distracción para casi ser atropellado por un auto. Afortunadamente, Damian se movió rápido como su entrenamiento le exigía, aunque al final, fue un tanto innecesario, pues el conductor frenó de todos modos, provocando el escándalo característico de las llantas derrapando sobre el asfalto.
El ajetreo hizo voltear al público callejero, incluyendo a Roy y a Jason, quien al mirar a "Tim" acercarse, no dudó en despedirse del pelirrojo como alma que lleva el diablo y abandonarlo a su suerte con aquellas cajas.
-¡¿A dónde vas?! –Roy gritó confundido luego del arrebato de Jason-. Bueno... ¡Gracias! ¡¿Cuándo te veo otra vez?!
-¡Yo te llamo, adiós, Roy! –Jason respondió abriéndose paso contra la multitud que se aglomeraba en la acera-.
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¡Ése no soy yo! [DamiJon/JayTim]
FanfictionLuego de una extraña explosión, Damian y Tim se percatan que cada uno ocupa el cuerpo del otro. Y todo se vuelve un desastre con todos los malos entendidos que se crean y deben solucionar sin revelar lo que les ha sucedido realmente; pues no quieren...