¡Ése no soy yo! [DamiJon/JayTim]

Capítulo 43

-¡¿QUÉÉÉÉ?! ¡Maldita sea! ¡NOOOOOO! –Exclamó Damian ya fuera de sí-. ¡A eso me refiero, maldición! ¡Tim no es tu hijo; YO SÍ! ¡YO SÍ SOY TU HIJO! ¡MÍRAME, MÍRAME, SOY DAMIAN! ¡SOY DAMIAN! –Exclamó sumido en desesperación y con su respiración agitada-.

Bruce deformó su entrecejo y apretó sus labios. Su preocupación no hizo más que aumentar y aquel mal presentimiento le tragó completamente el corazón.

Su discusión no iba hacia algún lado productivo. Y en cuanto Bruce decidió volver a abordar el tema, Damian simplemente explotó nuevamente.

-Tim, definitivamente no estoy entendiéndote. –Afirmó Bruce de verdad contrariado-. Y ya lo dije; eres mi hijo... ¡Mi hijo!

Damian sintió vomitar. El coraje que sentía al escuchar esas aseveraciones le provocaba una migraña impresionante y unas gigantescas ganas de estallar.

Se percibía como un chiste, como el segundón, como algo remplazable. Se sintió tan poca cosa. Ser ignorado como el hijo de sangre le dolió profundamente.

-¡NO! ¡No lo es! ¡Tú único hijo soy yo! ¡Tim es un donnadie y yo no! ¡Soy tu único heredero, llevo tu sangre, tu ser, tu carne! ¡TIM NO ES NADIE, YO SÍ! ¡YO SÍ! –Gritaba desgañotándose, tan impropio de él-. ¡Yo soy tu hijo! ¡YO SOY TU HIJO! –Alzó la voz agitándose frente a Bruce; lo que hizo reaccionar al padre sin mucho reflexionar-.

-Tim... -Llamó Bruce queriendo apelar a la mesura y al sentido común de su hijo, pero Damian yacía enajenado en su berrinche, en su decepción y en su dolor nacidos de la ignorancia por parte de su padre y de la que era víctima-. Tim... -Quiso volver a llamar a su calma, pero su paciencia se desbordó con otra impertinencia del más joven-. Tim, hijo...

-¡NOOOOOOO! ¡YA BASTA, TIM NO ES TU HIJO! ¡NO...!

Los ánimos de Bruce se encendieron de repente. Esa negación lo enfadó en segundos. Interrumpió a Damian contundentemente.

-¡NO ES...!

-¡TIM, CÁLLATE YA! –Bruce impidió que siguiera con un grito imperativo y algo cruel-. ¡¿Qué dices?! ¡Claro que eres mi hijo! ¿Por qué lo dices de ese modo? –Inquirió mostrando preocupación en su entrecejo-.

Fue entonces que Damian cayó en cuenta, nuevamente, por enésima vez, de su comportamiento incorrecto, egoísta e inoportuno, así como de su estúpido descontrol.

"¡¡¡Demonios!!!" Exclamó para sus interiores.

Neciamente, sus emociones le habían ganado otra vez y lo estaba arruinando todo reiteradamente.

En menos de un parpadeo, se sintió como la basura más grande e idiota de la historia de la humanidad. Jamás en su vida se había comportado de una manera tan irresponsable y tonta. Se sentía peor que un muerto; olvidado, deshecho y podrido.

-¿Tim...? –Murmuró Bruce acercándose más hacia él-. ¿Tim, acaso...? –Se puso frente a él sin dudas y le retiró la capucha sin pedir permiso-.

Damian se asustó, pero lo dejó continuar.

-Tim, hijo... -Le murmuró justo antes de inclinarse hacia delante para que ambas frentes se tocaran-.

El alma de Damian casi se sale de su cuerpo al sentir el contacto. Pensó que cualquier otro movimiento de su parte y terminaría por cerrarse el nudo en el cuello que se había puesto.

"¿Qu-qué...? ¿Qué está sucediendo aquí?" Pensaba Damian mientras su cuerpo se paralizaba por ese trato tan extraño que "Timothy" estaba recibiendo.