Veo la dirección que me mandó Eros. Tengo que hablar con el seriamente sobre Evan. Llegó a un departamento bonito, es un edificio que tiene gimnasio y alberca por lo visto, saludo al de seguridad y después de su aprobación entro, subo al elevador y tocó la puerta.
Eros abre con una gran sonrisa, me jala dentro del departamento y me besa acorralandome a la pared.
-Bienvenida a casa amor- lo miro crédula.
-¿Que?- digo atónita.
-Es nuestra casa amor- dice feliz, abro los ojos asombrada, salto a sus brazos y envuelvo mis piernas en usa cintura, el me sostiene por mis glúteos y da vueltas riendo.
-Lo compre hace una semana, es nuestro- lo besó y el sonríe. Amo a esta hombre joder.
-¿Te gusta?.
-Me encanta, me encanta, me encanta- grito bajo, el sonríe y avanza por el pasillo hasta llegar a una habitación donde veo cajas en el suelo.
-Como sabía que te iba a gustar, fui a tu departamento y saque tus cosas- sonríe, Bros su frente y me sienta sobre de el.
Acaricia mi cintura con firmeza y respira en mi cuello. Besa mi cuello dejando posibles hematomas de los que lo llegañare mañana, siento su miembro crecer y sonrió con picardía, entonces me despido de mi camisa dejándome en brasier. Sonríe en mis pecho y los lame con placer. Gemido suaves salen de mis labios y los gruñidos de Eros me provocan más.
(.....)
Me levanto en sus brazos, ayer me hizo el amor. Sonrió viendo sus labios, los beso castamente y acaricia su cabello, este hombre me vuelve loca.
Me levanto de la cans y lo veo desnudo bajo las sábanas, sonrió admirando lo. Me coloco su camisa la cual me llaga bajo de los muslos, me coloco ropa interior y voy a la cocina, no hay absolutamente nada.
Bufo y vuelvo a la habitación. El departamento es precioso. Me coloco ropa y dejó una nota en la cama deciendole que fuí a comprar algo para desayunar.
Salgo de la casa y me dirijo a su auto, subo y me dirijo al súper mercado. Compro varias cosas y suficiente comida para una semana. Pago y regreso a casa.
Cuando regreso, el sigue durmiendo, sonrió, es una dormilón.
Me pongo a preparar panqueques como le gustan, aún no puedo creer que allá gastado en un departamento. Preparo café y jugo de naranja, entonces voy a levantar al bello durmiente. Esta boca abajo, veo sus nalgas perfectas y sonrió, le doy un par de nalgadas y beso su frente.
-¿Qué haces ahí? Vuelve a la cama- sus ojos se ven levemente inchados, sonrió, me jala de la cintura y me toma en brasos abrazándome, cierra los ojos y respira en mi cuello.
-Levantate amor, ya hice desayuno-el frunze el seño aún sin abrir los ojos.-Tu favorito.
En eso abre los ojos y se levanta de la cama aún desnudo, sonrió y el besa mis labios.
-Buenos días amor- dice en mis labios.
Me levanta en su hombro y veo que aún sigue desnudó, pellizco sus nalgas y el da un brinco, suelto una carcajada ronca y el me devuelve la nalgada pero en palmada-:Pequeña traviesa.
Me deja en el comedor donde servi el desayuno y sus ojos brillan. Regresas al cuarto y lo veo ya en ropa interior.
-Si para que me cocines así, te compraré departamento seguro- río y empezamos a desayunar.-Te amo.
-Yo igual- el guiño un ojo-Necesito hablar contigo amor- me mira atento-¿Por qué accediste a pelear con Evan en fase tres?.
-Me provocó, dijo que no te amaba y que era un poco hombre, ya sabes cómo soy. Lo rete y acepto, no dejaré que se meta entre nosotros.
-No quiero que pelees con el.- suspira.
-Tengo que hacerlo amor.
-No Eros, no quiero que lo hagas por favor- suplico.
-Peleare con el en fase dos- ruedo los ojos.
-No puedo verlos pelear amor, los amo.
-Solo me tienes que amar a mí Sky. Yo soy tu novio, el no debería de preocuparte.
-Pero lo hace Eros, por favor no se lastimen mucho.
-Eso intentaré, pero si me provoca ya sabes que pasará-Si, lo sé. Lo matará.
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Tempestad.
Romance> Sky Smith después de haber estado secuestrada por un año a manos de su padre el cual la prostituía ,logra escapar de ese mundo para sumergirse en uno peor: El Bronx.