Los Juegos de OT || ALBALIA || JULRIGHT ||

Capítulo 14

POV Carlos

Al principio me quedo parado sin hacer nada y Julia me suelta la mano agachando la cabeza. He echado de menos pasar tiempo con ella, no sé porque dudo, sí tan solo está intentando arreglar las cosas.

-Claro.-afirmo con una sonrisa.

Julia levanta la cabeza y empezamos a andar. Al principio ninguno dice nada y es bastante incómodo. Tengo la sensación de que Julia quiere pedirme perdón por haber estado así conmigo, pero no sabe por dónde empezar. Así que decido romper el hielo para que sea más fácil.

-No te haces a la idea de lo bien que nos lo vamos a pasar con Palmera Alba y yo. Quizás deberías pasarte por  Hufflepuff alguna noche.-comento dándole un suave empujón.

-Quizás sí.-contesta antes de ponerse sería.- Carlos...

Se para y se coloca delante mío.

-Siento haber dejado de hablarte así sin más, soy horrible. Justo cuando necesitabas más nuestro apoyo te hago esto...-admite triste.-Los Juegos me estaban empezando a pasar factura y tú te ibas...

Los ojos se le humeceden  y le cuesta hablar. Verla así me destroza. Puede que me haya hecho pasar un mal rato, pero sigue siendo mi amiga. Julia no suele mostrar sus sentimientos a nadie que no sea Natalia, y, que se abra a mí, me parece demasiado bonito como para dejarlo pasar. La abrazo con cuidado y le acaricio el pelo mientras rompe a llorar. Dudo que ella misma sepa porque llora. A veces simplemente lo necesitamos. No entender nuestro propio comportamiento nos conlleva a sentirnos impotentes, y esa sensación nos hace sentir aún peor.

Cuando se ha calmado un poco se separa de mi y le acaricio las mejillas quitándole algunas lágrimas.

-No me voy a ir.-afirmo convencido

Y es que ahora sé que, si hubiese tenido que escoger entre quedarme aquí o en Chicago, me hubiese quedado allí, o en cualquier lugar siempre que fuese con ellas. Después de todo lo que han hecho por mí, no sería capaz de dejarlas tiradas. Tampoco es que necesiten mi ayuda, pero yo sí que necesito la suya. Aunque, también tengo que admitir que me estaba replanteando quedarme en Howgarts por otra razón. Una razón que lleva rondando por mi cabeza desde hace unos días y que no me había querido creer hasta ahora.

-Pero querías irte.-murmura Julia.

-Eso no es verdad.

En parte lo era, pero ya no.

-¿No querías quedarte en Howgarts?-pregunta incrédula.

Quería huir.

-Tenia mis razones para quedarme en Chicago.

-¿Como cuales?

No sé las puedo decir. Aún no.

-Prefiero no contarlas.

-¿Porque?-insiste Julia.

Porqué una de esas razones eres tú.

-Porque es muy personal.

-¿No confías en mí?

¿Como no voy a confiar en ella?

-No es eso...Cuando esté preparado te lo contaré.- le aseguro.

-¿Puedo hacerte una pregunta?-me dice.

-Claro.

-Tu tenías tus razones para quedarte en Chicago, si yo, y Alba y Natalia, nos hubiésemos ido a Howgarts ¿Te hubieras quedado en Chicago?-sugiere alzando una ceja.

La verdad es que no se qué responderle. La razón principal por la que había decidido quedarme en Chicago eran ellas. En especial Julia, estoy empezando a sentir cosas y me daba miedo separarme de ella. Pero evidentemente no le voy a responder eso.

-El partido va a empezar, deberíamos ir hacía el estadio ya.-respondo evadiendo su pregunta.

Julia me mira con una sonrisa pícara en el rostro. Entrelazo mi mano con la suya y pongo rumbo al partido antes de que vuelva a pregúntarme por eso.

Sinceramente, no sería capaz de evitar más esas preguntas y terminaría confesando.

Y creo que todavía es demasiado pronto para eso.