the fox and the kangaroo. [Cancelada]

❝capítulo 20❞

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   eran las 9 de la mañana y jeongin ni siquiera había logrado despertarse cuando su madre entró a la habitación, podía notar una sensación rara en ella, como tristeza, pena o nerviosismo. esta en una voz baja y luego de un suspiro le pidió si podía ir a la casa de chan.

   yang ni siquiera había logrado percatarse de que la situación era algo extraña, culpen a su sueño, se arregló con pereza y tomándose su tiempo, llevó consigo todas las cosas que prodría necesitar, como su billetera y celular antes de despedirse de su papá y mamá, pasó de despedirse de wheein ya que seguramente estaría durmiendo y no le tomó mucho tiempo llegar hasta la casa de los australianos, en la puerta lo esperaba su gatito azavache meneando la cola.

   ¿in estaba llorando? no estaba seguro, ¿cómo lloran los gatos? quizás se había enfermado, y con una mirada tierna, como si eso pudiera apacigüar su dolor, camino junto al gatito para acariciarle la orejita, pero contrario a todo lo que esperaba el gato gruñó, mordió su mano y salió corriendo desesperado a esconderse en otro lado de la casa ¿raro? no lo suficiente, quizás solo había vuelto a comer la comida del perro, o quizás era jeongin quien no acababa de darse cuenta de lo que estaba pasando.

ㅡ¡chan hyung!ㅡ gritó como solía hacerlo esperando a que salieran a abrirle la puerta.

   como era común, la señora bang salió para abrirle la puerta al invitado, tenía la misma mirada apenada que su propia mamá y después de un cariñoso saludo le avisó que su hijo estaba arriba, justo al entrar la madre de chan iba bajando la escalera con un vaso en mano y avisándole lo que ya sabía: ㅡchan está arriba, cariño.

   sí, aún no parecía completamente algo fuera de lo común, no hasta que entró a la habitación, chan estaba acurrucado en una esquina de su cama abrazando una almohada, su cabeza enterrada en esta, el cabello desordenado, aún poseía su pijama y su espalda se sacudía junto a pequeños hipidos y suspiros en un intento de respirar el aire que al parecer le faltaba.

ㅡ¿hyung?ㅡ el grito exaltó al nombrado quien empezó a llorar, un grito desgarrador y profundo desde el fondo de su garganta, luego silencio y solo suaves sollozos, chan parecía querer gritar y expulsar todo lo que tenía, pero su voz rota le impedía sacar lo que llevaba.

   jeongin completamente aterrado corrió a sentarse junto a su mayor quien le daba la espalda, tocó su hombro alarmado para que este le dijera algo, pero este parecía no querer ceder: ㅡhyung, ¿qué pasa? ¿hyung?ㅡ notó como este al parecer quería decir algo así que se calló unos segundos acercándo su cabeza para escucharlo, ‘cállate’ la petición le pareció algo ruda pero la acató instintivamente. hace mucho tiempo que no escuchaba a bang llorar, al menos no con tantas ganas, es verdad que de pequeños era algo común, -aunque él sabe que el australiano es una persona sensible- no obstante, hace algunos años que no le habría visto más que unas pequeñas lágrimas.

   con el cariño con el que se le caracteriza, jeongin recostó la cabeza de bang en sus piernas haciéndole cariños en el cabello, no sabía si era buena o mala señal que ante esto el de cabellos grisáceos soltara más lloriqueos y su espalda se agitara en sollozos, la situación le resultó de una extraña manera tan nostálgica, cuando chan era un pequeño niño flaquito y miedoso que no sabía defenderse, que corría aterrado de los chicos y las chicas que lo molestaban para resguardarse en los brazos de su zorrito, ya solo quedaban pequeños rastros de ese niño, ahora era un adolescente fuerte y decidido, pero al final del día siempre llegaba corriendo a los brazos de su animalito. por unos largos minutos las lágrimas sesaron haciéndole pensar al azabache que bang ya estaba dispuesto a conversar. chan se dio vuelta para esconderse en el estómago del alto, y pudo jurar que por dos segundos el extranjero volvió a ser ese pequeño niño que llegaba llorando a su casa, por los dos segundos que pudo ver su rostro se sintió tan devastado que ni siquiera dudó la razón por la que chan se encontraba así, todo su cuello estaba sudado y su rostro completamente rojo, sus ojos hinchados que apenas podían abrirse y su cabello pegado a su frente, no era una bonita vista en ningún sentido, hace años ver al bajito lagrimeando podía parecerle incluso tierno, este no era uno de esos momentos.

   sollozaba su nombre mientras trataba de decirle algo y sin entender la situación jeongin soltó un par de lágrimas solo por la imagen de su amigo, su corazón se apretó tanto que sus manos pararon de moverse y solo lo abrazó como pudo. chan se quedó dormido tiempo después y jeongin bajó para preguntarle a alguna de sus mamás qué había pasado.

   ambas estaban sentadas en la mesa de la cocina con cara de preocupación charlando de algo, seguramente sobre su hijo, hasta que el menor llegó y ambas se callaron.

ㅡ¿está mejor?ㅡ preguntaron ambas casi al instante.

ㅡno sé como estaba antes, pero no parece mejorㅡ ambas asintieron formando otro pequeño silencio interrumpido por él mismo ㅡ¿qué pasó?

ㅡ¿no te contó?ㅡ preguntó una de ellas algo confundida.

ㅡchannie dijo que no lo haríaㅡ le respondió de forma obvia.

ㅡinnieㅡ prosiguió cariñosamente invitándolo a sentarse junto a ellas ㅡinnie, chris murió, chan lo encontró en el patio cuando salió a alimentarlos por la mañana, estaba... destrozado, seguramente se peleó con otros gatosㅡ hubo otro silencio, roto abruptamente por el sonido de agua corriendo, yang miró al costado por un segundo para encontrarse con la madre de su amigo sirviendo agua en un vaso ㅡel tampoco quería que vinierasㅡ agregó ㅡno quería contarte, tampoco quería ver a nadie.

   el menor se quedó callado, comprendiendo la situación, asintiendo en silencio mientras la castaña se acercaba con dos vasos  de agua en una bandeja, junto a golosinas, pan y unos cupcakes.

ㅡ¿podrías llevárselo? para que coman.

   el azabache volvió a asentir llevándose consigo la bandeja hacia arriba, tenía los ojitos brillosos y se mordía el labio inferior, en la habitación bang estaba acostado de espaldas mirando hacia arriba, parecía más calmado, se asomó por la puerta para que le diera el permiso de entrar pero al no recibir ninguna señal simplemente se adentró dejándo la bandeja a los pies de la cama, cuando llegó a su lado notó que aún habían unas pequeñas lágrimas que caían por sus ojos, también habían unas de esas en las mejillas del menor.

ㅡchanni-

ㅡjeonginㅡ fue interrumpido por unas palabras rápidas, parecía decirlas con velocidad para no volver a llorar ㅡchris-

ㅡlo séㅡ ahora fue el turno de yang para interrumpir ㅡya me lo contaronㅡ chan asintió con la cabeza ㅡtambién me mandaron a traerte comida.

   parecía que por un milisegundo volvió a sonreír volviendo rápidamente a su expresión neutra, se sentó en la cama con ayuda del menor y bebió un largo trago de agua con sus manos tiritosas, comío de a grandes bocados casi quedándose sin aire y con las lágrimas cayendo por sus mejillas, pero se veía mucho mejor. jeongin se fijó en las manos del mayor, arañadas y morididas por los felinos, seguramente en su mayoría fueron hechas por in pero no pudo evitar pensar en cuantas de ellas habrían sido hechas por chris y lloró un poquito, al terminar de comer chan se quedó dormido y el otro se retiró de la casa.

   semanas más tarde in murió de la pena, chan encontró su cuerpo junto a la tumba de chris, lloró por horas pero no se atrevió a decírselo jeongin hasta tres días después del suceso, fue una tarde en la que simplemente se abrazaron por un tiempo.

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﹙👅﹚ hOOoooOla¡! jajajjaj perdón :( pero ya había llegado su hora asies.

debo admitir q m dio algo d penita escribirlo y estoy como, ríendo para no llorar, asies, es raro pq al escribirlo m dio mucha pena pero ahora q lo vurlvo a leer quedó super fome, plus ando escribiendo como la mierda pero así es como escribo normalmente xde. tengo pensado hacer algo bonito a raíz d este capítulo en un futuro.

esopo, se está poniendo oscuro así q cuidao con el hee hee😔👊.