"El despertar."
Me quedo unos segundos mirándolo, su perfil es realmente hermoso y estar preocupado lo hace ver igual de bien que estar neutral.
— ¿Dónde está el collar? —Mi voz lo sacó de su trance haciendo que voltee a verme, sus cejas juntas me indican que aún sigue preocupado. — Lo recuerdo todo, Dev.
—Sabía que lo harías al transformarte. —Se acerca un poco a mí. — ¿Te sientes bien? —Mi estómago está que ruge y sé que quiere.
—Tengo hambre, puedo suponer de qué. —Él asiente.
—Espera aquí, les diré que despertaste y sobre tú apetito. —Camina fuera, miro mis dedos descubriendo que el anillo de mi familia biológica sigue ahí.
—Iré contigo, quiero ver a todos.
—Es de día, te quemarás. —Levanto la mano dónde se encuentra el anillo.
—Me lo han dejado por que lo encantaron ¿no?
—Es de tu familia, no te lo quitamos desde que paso el incidente con la banshee. —Sale dejándome sola aquí, me paro observando un pequeño rayo de luz solar queriendo entrar completamente.
Me acerco a la cortina y la muevo un poco poniendo mi mano al sol, de inmediato comienza a humear y volverse roja por lo que la quito frotándola. La quemadura desaparece en segundos como si nada hubiera pasado.
El dolor me devolvería a la vida real ¿no? Eso quiere decir que esto es verdad, o al menos eso creo yo.
Devon entra junto a Dann, ella sostiene una copa de vino con algo espeso y rojizo dentro.
—Ten, bebe mientras aún sea tibia. —Me da la copa y no lo dudo, comienzo a tomar todo el contenido hasta dejarlo seco. —Ginger se cortó su mano para que tuvieras sangre fresca sin tener que morder a alguien.
— ¿No era mejor un conejo? —Devon niega. — ¿Por qué?
—Cuándo un humano tiene la transición a vampiro, al despertar necesita sangre humana para completar la transformación. Si no la bebe morirá como debía. —Frota mi brazo para luego salir con la copa.
—Aquí está por lo qué preguntabas. —Me muestra aquella caja azul con el collar. —Rouge le ha hecho el encantamiento para que no te vuelvas cenizas. —Agarro mi cabello y me doy la vuelta, él me coloca el collar con la misma delicadeza que la primera vez.
—Gracias. —Gire quedando cara a cara, subí mi mano para acariciar su mejilla. — ¿Por qué lo hiciste? ¿Por qué creaste toda una, no, nuestra historia y la borraste?
—Si dejaba que recordaras no hubieras estado a salvo. —Cierra los ojos sintiendo mi tacto pasar por toda su cara. —Pero decidiste escapar, decidiste dejar de huir de algo que no sabías. ¿Por qué?
Rafaella, mi doble sangrienta que decidió luchar y hacerme luchar por mi cordura.
—Instinto, supongo tu amnepatía no tuvo completo efecto en mí. —Sonríe de lado. —Quiero ver a todos, incluso a Riven que ahora me dará nauseas.
—Los perros estos huelen así. —Camina hacia la puerta seguido de mí y lo primero que sentí fue el hedor del coyote.
— ¡Eh! ¡Al menos sal con una sonrisa! —Ríe marcando unos hoyuelos a cada lado, eso le da un atractivo indiscutible.
—Hiedes, es inevitable. —Me mira ofendido. — ¿Demasiado honesto para ti?
—Te dije que es cosa de vampiros sentir ese hedor desde siempre. —Dann flota sobre el sillón, no lo toca y esta como recostada.

ESTÁS LEYENDO
Vampiro por Accidente.
VampireEl tiempo más corto es aquel que causa más daño, un tsunami puede comerse una ciudad en cuestión de minutos. ¿Puedes imaginar la cantidad de daño que haría en tan solo 1 hora? Comparemos mi inicio con eso, ir de una escuela donde reinaba estando rod...