Hay encuentros que engendran relaciones aberrantes. Relaciones inexplicables, retorcidas, tóxicas y disfuncionales, al mismo tiempo que ineludibles e irresistibles. Dicen que del amor al odio hay un paso, pero en éstas ese paso no es necesario. Des...
Bueno... normalmente cuando alguien publica una nota en un fic que lleva mucho sin actualizarse, esta suele informar de la definitiva puesta en pausa/hiatus/parada... de la historia. Oh sí... las notas suelen dar mucho miedito y estar llenas de sentidas disculpas, además de excusas y más excusas. Yo desde luego que las odio a muerte.
Pero esta nota en realidad no es para tanto. Cierto que está llena de disculpas, excusas y explicaciones. Pero os anuncio desde ya que le podéis quitar el componente del hiatus.
Así que cuando acabe, tendrá el botón de siguiente capítulo, no os preocupéis. Sobre si os va a gustar o no lo que viene a continuación, ya si que tengo serias dudas, y de ahí que escriba la nota esta que asusta tanto.
Veréis, yo siempre publico los capítulos no solo cuando termino, sino cuando los he pulido lo suficientemente bien, como para estar contenta con lo escrito. Es decir, muchas veces he borrado capítulos enteros y los he terminado rehaciendo desde el comienzo porque al cabo de un par de horas de terminar, me parece que algo les falla. Un capítulo que permanece en esta fase beta, normalmente sufre bastantes remozados, y no solamente de gramática u ortografía.
El problema está en que este próximo capítulo y el siguiente, llevan en esta fase demasiado tiempo y siguen sin gustarme. Son ambos, capítulos de flashforward, en los que la historia avanza a pasos agigantados, transcurriendo años para los personajes. Ese tipo de narrativa es tan poco apropiada para mi modo de escribir (siempre describo la historia a través de viñetas o situaciones relativamente cortas) que el ejecutarlo me resulta más complejo incluso que el maldito lemon. Si alguno ha leído otra de mis historias, el Circulo, se acordará que en ella hay dos momentos similares donde transcurre un período de un año en uno y de casi 200 en otro. En ambos casos recurrí al mismo truco de las cartas, pero usarlo de nuevo habría sido demasiado canteo. Así que he probado con la narrativa normal y he conseguido escribir los dos capítulos más aburridos de mi historia como ficker.
Normalmente no los subiría hasta que los pudiera arreglar y estuviera contenta con el resultado... Pero vosotros lleváis demasiado esperando y yo lo he probado todo y me he quedado sin ideas.
Los he reescrito varias veces, los he partido y juntado, he probado diversas técnicas y nada... Siguen siendo un tostón infumable.
Así que al final me he cabreado y los he decidido subir, tal como están. Este fic se me ha atragantado desde el primer día y a estas alturas lo único que quiero es terminarlo. Por suerte ya no le queda casi nada.
Así que con esta nota no pretendo asustar sino disculparme. Por la espera pero sobre todo por el tremendo peñazo que estáis a punto de meteros entre pecho y espalda. Solamente deciros que los de después no serán tan aburridos, pero si tras estos dos decidís abandonar, lo comprenderé.
***
Como compensación por aburrir os meto estos chistecillos, que reírse nunca viene mal.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Naraku: ¡Así que tú serás el Gran Perro Malo y yo seré la Pequeña Caperuza de Orangután Roja!¿Lo has pillado? Sessh: Tú eres retrasado...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Naraku: Amado mío, hoy vengo a entregarte esta mano y a pedir tu anillo en matrimonio... ¿O era al revés?
